La llamada “flor de la abundancia” es conocida por ser una cadena de ayuda económica. No obstante, de acuerdo a lo que indican los investigadores, lejos está de ser una forma de hacer crecer los ahorros, más bien se trata de una estafa a gran escala.
Desde la Dirección de Cibercrimen, dependencia que forma parte de la Dirección General de Inteligencia Criminal de la Policía de Misiones, advirtieron sobre esta forma de robo que se encuentra en crecimiento en Misiones.
Sandra Ozuna, a cargo de la dependencia, indicó a El Territorio, que “no se trata de algo nuevo, sino de una nueva forma de la conocida cadena de favores que terminaba en la misma forma de estafa”.
El sistema consiste en que una persona (el centro de la flor) administre las donaciones de los pétalos (los aportantes), que constan de diferentes niveles. La idea es que cada pétalo aporte un monto de dinero y a su vez invite a otras ocho personas, a fin de formar un nuevo círculo de pétalos.
Una vez que los ocho aportantes concretaron la donación y cerraron el círculo, el centro cobra el dinero, y uno de los pétalos pasa a ocupar ese lugar. No obstante, el problema está en que la flor siempre se extiende y termina beneficiando a unos pocos; y cuando se rompe -porque ya no quieren entrar más participantes – quienes no lograron cobrar no lo podrán hacer jamás.
Los especialistas puntualizaron que este sistema se difunde entre gente conocida de forma rápida y silenciosa a través de las redes sociales, como Facebook y WhatsApp.
“Se está extendiendo de forma muy rápida acá en la provincia, por lo que debemos estar alertas y no caer en esa trampa. Nunca se gana, siempre es una estafa”, determinó Ozuna.
Phishing
De la misma manera, son cada vez más los delincuentes que se valen de información personal para cometer estafas y robos a través de redes sociales, correos electrónicos o mensajes de texto.
“Hay un delito denominado phishing o suplantación de identidad, que es el delito de tratar de pescar señales y buscar información a través de correos o redes para que las personas envíen e introduzcan información personal. El objetivo es poder robar plata de los cajeros o hacer los famosos secuestros virtuales», relataron desde la Dirección de Cibercrimen.
«Es una modalidad de estafa nueva caracterizada por intentar adquirir información confidencial de forma fraudulenta”, añadieron.
Una forma de phishing que comenzó a notarse en la provincia es a través de correos electrónicos de diversos bancos y entidades con ofrecimientos de promociones o préstamos de manera rápida.
“Son links o enlaces que te llegan por mail, para que vos abras y cuando lo hacés automáticamente están captando toda tu información, contraseñas, datos, porque no es un link real del banco, incluso aunque tenga el logo, son links clones o fantasmas, por eso uno no se da cuenta”, relataron.
Fue por este motivo que las entidades bancarias y financieras realizan hace tiempo un trabajo de recomendación, avisando a sus clientes cuáles son las únicas formas que utilizan para comunicarse.