La esquina de avenidas Maipú y Alta Gracia de la capital de Corrientes se ha transformado en un escenario sumamente productivo para “motochorros”. Ayer, al igual que en numerosas ocasiones anteriores, robaron a pasajeros de un ómnibus de larga distancia que detuvo la marcha ante un semáforo en rojo.
El delito se produjo en plena mañana, delante de varios automovilistas, uno de los cuales persiguió a los malhechores y estuvo muy cerca de atropellarlos.
Alrededor de las 11, una unidad proveniente de la ciudad de Posadas, Misiones, estaba próximo a llegar a la terminal.
Aprovechando que el micro estaba detenido dos ladrones (un flaco alto y un petiso de contextura robusta) se colocaron al costado del vehículo y uno de ellos destruyó una de las ventanillas con el uso de un objeto contundente, justo a la altura de los asientos en los que estaba un matrimonio de ancianos.
Con asombrosa rapidez sustrajeron un bolso cargado con dinero y otros objetos personales de ambas personas.
“Escuchamos el estallido y cuando miramos ya estaban escapando. Se fueron en una Honda CG 125 azul”, dijo al diario Época uno de los dos choferes a cargo del transporte.
Como consecuencia de la agresión una mujer fue la principal afectada. Restos de vidrio cayeron sobre su rostro y brazos, aunque por fortuna no sufrió cortes sino laceraciones leves. Sin embargo resultó con un fuerte shock emocional y debió ser contenida en todo momento por su marido.
A lo largo de unas tres cuadras el conductor de un auto rojo siguió a los “motochorros” hacia el interior del barrio San Antonio Este. Pero los perdió de vista cuando llegaron a la zona conocida como “El Cocal”.
El resto de los pasajeros se vieron conmocionados y envueltos indirectamente en un ilícito que les produjo una severa demora para llegar a destino.
Al lugar acudieron patrullas policiales y luego de un testimonio preliminar siguieron viaje hasta la terminal capitalina, aunque el destino final debía ser la ciudad de Resistencia, capital de la provincia de Chaco.
Los conductores dejaron en claro que después de dejar a los pasajeros iban a radicar la denuncia. A la vez, ambas personas víctimas directas del robo también fueron invitadas a acercarse a la comisaría.
“Acá los chorros se hacen la papa todos los días (sic)”, dijo un testigo del ilícito, quien habitualmente cruza por el lugar para ir a su domicilio.
La intersección de Maipú y Alta Gracia divide a los barrios San Roque y San Antonio.
También parte en tres a las jurisdicciones policiales, con sus comisarías Decimocuarta (interviene en este hecho), Decimoquinta y Vigesimoprimera.
Tal como diario época lo reflejó en sus páginas, tal esquina ha sido en los últimos meses escenario de ataques a personas que viajan en automóviles y ómnibus de larga distancia mientras frenan delante de los semáforos, tanto cuando llegan a la ciudad como cuando parten a otras provincias.
Fuente: diario Época