El carnicero de 44 años que se había declarado culpable de abusar de su hija en Oberá recibió la pena de tres años de prisión en suspenso, porque se comprobó que no hubo acceso carnal sino sólo manoseos.
Cuando sucedió el hecho, en 2005, la nena tenía apenas cinco años. El hombre accedió a someterse a un juicio abreviado por el delito de “abuso sexual agravado por el vínculo”.
Su defensa acordó con la fiscal Estela Salguero de Alarcón evitar el debate oral. Pasa que las pruebas contra el acusado son abrumadoras.
La Fiscalía elevó el acuerdo al Tribunal Penal obereño, compuesto por José Pablo Rivero, Lilia Avendaño y Francisco Aguirre, quienes decidieron homologarlo.
La denuncia que disparó la causa fue radicada por la madre de la nena. Todo sucedió en Oberá, en la residencia familia de la víctima, a fines de marzo de 2015.
La chiquita le confesó a la mamá que el padre la había manoseado y que la amenazó para que no contara nada. La mujer acudió de inmediato ante las autoridades e intervino la Justicia.
Oberá: Carnicero condenado por abuso recibió tres años de prisión en suspenso
