Este miércoles juzgarán en el Tribunal Penal de Oberá a Victoria Aguirre y a su ex pareja Rolando Lovera, ambos de Oberá. Ellos están imputados por el homicidio de la hija de la mujer, Selene, de poco más de dos años y que sufría un retraso madurativo.
Será la primera de seis o siete audiencias y hay gran expectativa por la repercusión que tiene el caso, dentro y fuera del territorio provincial.
Distintas organizaciones de lucha contra la violencia de género han salido a apoyar a Aguirre, ya que la consideran víctima y no victimario.
Trascendió que la joven va a declarar cuando la llamen a indagatoria. Y que acusará por el crimen de su hija a su entonces concubino.
La chica, que estudiaba magisterio y que estuvo todo este tiempo encerrada en la Unidad Penal V de Mujeres de Miguel Lanús (Posadas), repetirá lo que dijo en la instrucción.
Victoria asegura que ella y su hija llevaban una vida feliz en el barrio obereño donde residía con sus padres. Pero que todo cambió cuando empezó la relación con Lovera.
Según la joven, el hombre empezó como príncipe azul y se fue destiñendo. Dijo que él le cortó todo vínculo con sus familiares e incluso le coartó la posibilidad de seguir estudiando.
Y no sólo eso, Victoria asegura que al poco tiempo Lovera empezó a mostrarse violento. Reveló que en distintas ocasiones la golpeó y que ella incluso les pidió ayuda a conocidos.
Sobre el día en que ocurrió la muerte de Selene, recordó que también hubo paliza para ella. Pero que Lovera extendió los golpes a la pequeña, en la zona de la cabeza, y que eso le provocó el deceso.
Repitió varias que ella vivía bajo un régimen de terror. Y que temía por su vida en los arranques de furia de su pareja.
Asistida por el abogado particular Roberto Bondar, este miércoles volverá a contar esa historia ante los jueces del Tribunal Penal de Oberá.
Lovera también tendrá la chance de hablar. Habrá que ver qué decide hacer.
El debate se llevará adelante en el Tribunal Penal obereño, cuya sala de audiencias se encuentra sobre la avenida 9 de Julio. Presidirá el proceso la camarista Lilia Avendaño, a quien secundarán sus colegas Francisco Aguirre y José Pablo Rivero.
Este miércoles, a las 8.30, será la primera audiencia. Se leerá el auto de elevación a juicio y se llamará a indagatoria a los acusados.
Desde el lunes que viene (3 de julio) y hasta el jueves empezarán a desfilar los 34 testigos citados por las partes.
La estrategia de la defensa de Aguirre es probar que el autor del crimen fue Lovera. Y que Aguirre fue víctima de violencia de género a lo largo de toda la relación que tuvieron ambos.
En enero de 2015, la nena, de dos años y cuatro meses, fue llevada al hospital Samic obereño, donde dejó de existir. La mamá dijo que había sufrido un golpe en la cabeza cuando se le cayó encima una computadora. Desde el centro de salud avisaron a la Policía y empezó la investigación. La Justicia dispuso el arresto de Lovera, sospechado de haberle propinado a la pequeña un golpe letal. A la chica la acusan de haber estado al tanto del episodio y de no haber hecho nada.
Aguirre está acusada del delito de “homicidio calificado” y si la hallan culpable, recibirá como castigo la prisión perpetua. A Lovera lo acusan de “homicidio simple”, que contempla penas de entre 8 y 25 años.
Fuente: Misionesonline