Vecinos de Villa Falk alertaron sobre el estado de abandono en que se hallan una anciana y su familia, integrada por una hija y varios nietos con diferentes grados de retraso mental.
Yolanda Carballo (71) reconoció la problemática y comentó que en varias oportunidades recurrió a la Municipalidad en busca de asistencia, pero hasta el momento no obtuvo respuestas concretas.
La anciana percibe una pensión, mientras que su hija cobra el salario universal por dos menores, monto que ni siquiera les alcanza para comer todo el mes, lamentó.
“Yo estoy enferma, necesito remedios y en el hospital no hay, pero tampoco puedo comprar porque no me alcanza”, admitió la mujer.
“Fui a la Municipalidad -continuó Carballo- para pedir que arreglen mi casa y me dijeron que ahora no pueden porque hay mucha gente que está peor que yo”.
Situación preocupante
A simple vista su estado de salud es preocupante, puesto que tiene heridas infectadas en las piernas.
Visiblemente abatida, comentó que su hija -de 45 años- padece retraso madurativo, al igual que dos de sus nietos, por lo que los problemas superan sus posibilidades de solución.
“Con la pensión apenas comemos, así que no puedo pensar en arreglar la casa ni hacer un tratamiento para curarme. Los vecinos son buenos y nos ayudan con lo que pueden, pero todos son humildes y no tienen mucho”, agregó.
La familia reside sobre calle Pilcomayo, casi 25 de Mayo, en Villa Falk, un sector donde las drogas hacen estragos, al punto que Carballo reconoció que su nieto mayor es adicto, lo que completa un panorama desolador.
Fuente: territoriodigital