Por estos días, socios y simpatizantes del Oberá Tenis Club (OTC) asisten con preocupación a una serie de trascendidos sobre presuntas irregularidades en el manejo de los recursos de la institución.
En ese contexto, la semana pasada la comisión directiva resolvió despedir a quien cumplía la función de secretaria administrativa, habida cuenta de una serie de cuestiones que hicieron “perder la confianza” en su desempeño, según reconoció Héctor Albea, presidente del club.
En diálogo con El Territorio, el dirigente explicó que durante un año la citada empleada manejó las cuentas del club e incluso tenía poder de cobro del subsidio proveniente del Estado provincial para el básquet profesional.
Al respecto, aclaró que hasta el momento no detectaron indicios de malversación de los subsidios, aunque en su condición de presidente fue intimado por el Tribunal de Cuentas por los comprobantes de gastos de 1.250.000 pesos de la temporada 2014/15.
Por ello, según Albea, la desvinculación de la cuestionada secretaria administrativa no guarda relación con la intimación mencionada.
“Fue despedida porque perdió la confianza de la comisión. Se puede decir que exhibió un manejo liviano, el cargo le quedó grande y le faltó humildad para reconocer a tiempo”, indicó.
Entre los cuestionamientos, se cita la disconformidad de varios profesores del club por la falta de rendición de las respectivas cuotas, como también ciertos gastos y atribuciones en el manejo del básquet profesional.
Incluso, ante la consulta de este matutino, Albea reconoció que la ex secretaria falsificó su firma en algún trámite, por ello agregó: “No descarto que haya derivaciones judiciales”.
Cuentas claras
La aclaración del presidente de OTC se dio en medio de ciertas suspicacias por el manejo de los recursos del Estado provincial para el sostenimiento del básquet profesional que está disputando la Liga Argentina.
En ese sentido, señaló que “lo que no se hizo bien, fue no entregar el comprobante cada vez que se pagó algo, por eso la intimación del Tribunal de Cuentas. Pero toda la plata que llegó tuvo el destino previsto. Se pagó a los jugadores, se hicieron los viajes, se compitió”.
Además, explicó que el Tribunal de Cuentas implementó cambios de criterio en la rendición de los recursos y comenzó a exigir una adecuada facturación. Todo con la favorable intención de clarificar las cuentas al extremo, considerando que se trata de fondos públicos.
“En un momento a las personas que estaban al frente del básquet les costó adaptarse a ese nuevo requerimiento y hubo demoras en conseguir las facturas y comprobantes. Por eso, el Tribunal de Cuentas me intimó por 1.250.000 pesos de la temporada 2014/15, pero ya estamos en condición de justificar ese período y solucionar”, remarcó.
A todo esto, al cierre de esta edición, el equipo principal de OTC enfrentaba a Villa San Martín, en Resistencia, por una nueva jornada de la Liga Argentina.
El proyecto celeste va tomando forma
Albea asumió la presidencia a mediados del 2014 y planteó la necesidad de integrar al básquet profesional a la comisión directiva, ya que hasta entonces la actividad parecía divorciada de la administración central del club.
Para esta temporada, en tanto, avanzó con el proyecto de provincializar el básquet y llevar los partidos de la Liga Argentina (ex TNA) a otras localidades de Misiones, como ya se hizo en el arranque de la competencia, con presentaciones en Eldorado y Posadas.
Al respecto, si bien la semana pasada concluyó la instalación del nuevo parquet del estadio celeste, Albea mencionó la intención de seguir jugando partidos en otras ciudades y alternar con Oberá. Por ello, se prevé que el próximo lunes 13 el equipo vuelva a ser local en Eldorado y después juegue dos encuentros en Oberá.
“Provincializar el básquet profesional es un objetivo de la institución y un compromiso con el Estado provincial, que invierte mucha plata en el proyecto. Logramos que la Municipalidad de Oberá aporte 100.000 pesos para el nuevo parquet, pero nos falta la reacción del sector privado para respaldar el aspecto comunitario”, agregó.
Fuente: territoriodigital