Ahora el Mate tiene un lugar. En Muy pocos días, los argentinos nos reuniremos para celebrar la infusión que es identidad nacional. Este año, el Día Nacional del Mate se festeja en MATEAR, los días 2 y 3 de diciembre próximo, de 11,00 a 20,00 horas, en el Salón Ocre de La Rural, en la ciudad de Buenos Aires.
Serán dos jornadas de reconocimiento a la infusión que es identidad porque en el Mate estamos todos y todo está en el Mate, y así quedó demostrado en un estudio encargado por el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) que actúa de base para acciones orientadas a fortalecer la presencia matera.
Más de 30 empresas, cooperativas y productores de la infusión y también de alimentos y accesorios que acompañan un buen Mate se están preparando para la mayor fiesta del sector, dando lugar a un encuentro donde la diversidad confluirá en rondas materas, ampliando los conocimientos sobre nuestra tradición, y revalorizando la historia y la cultura centenaria. Habrá degustación, comercialización, socialización, degustaciones, sorteos, charlas y multiplicación de buenos momentos.
MATEAR es la primera feria de yerba mate y sus productos derivados, organizada por el INYM como un reconocimiento a la infusión y en coincidencia con el Día Nacional del Mate, que se celebra (desde el 2015) cada 30 de noviembre en conmemoración del nacimiento de Andrés Guacarí y Artigas (Andresito), ex comandante general de la provincia nororiental de Misiones (1811-1821), quien defendió estas tierras de las invasiones luso-brasileñas.
No quedan dudas, el Mate es lo que más nos representa como argentinos. Fue elegido por la gente como rasgo identitario de la argentinidad, superando a la carne, el vino y el dulce de leche, y entre las diferentes formas de consumir yerba mate, el uso del recipiente con bombilla es por lejos el más elegido (que ocho de cada diez argentinos –el 80%- declararon haber consumido Mate tradicional en los últimos 30 días).
Así lo certifica un estudio encargado por INYM que consultó acerca de nuestro hábito frente a la elección de otras infusiones, la frecuencia y las razones de su consumo, el conocimiento de sus beneficios nutricionales y su rasgo identitario de la cultura argentina.
En correlato con los datos enumerados, cabe destacar que la yerba mate está presente en más del 90% de los hogares y que los argentinos consumimos alrededor de 256 millones de kilos del producto, lo que implica un consumo anual per cápita de unos 6,4 kilos.
Tomar Mate es mucho más que una tradición. Nos acerca, es sinónimo de encuentro que trasciende lugares, edades y estratos sociales. Si estamos lejos de nuestro país, un buen Mate nos hace sentir en casa. Si estamos aquí, un buen Mate reivindica el sentido de pertenencia.
Su incorporación a la dieta está respaldada por los estudios científicos que evidencian que estamos ante un alimento funcional, y de efecto protector en enfermedades metabólicas y degenerativas de la salud humana.
Así, gracias a sus propiedades antioxidantes y energizantes, certificadas por científicos argentinos y de otros países, al tomar Mate incorporamos gran cantidad de polifenoles, vitaminas del complejo B, potasio, magnesio y xantinas. Los polifenoles actúan como un poderoso antioxidante, que ayudan a aumentar las defensas y a disminuir el envejecimiento celular. Las vitaminas del complejo B ayudan al cuerpo a aprovechar mejor la energía de los alimentos ingeridos. El potasio y el magnesio son sustancias indispensables para el correcto funcionamiento del corazón. Las xantinas (cafeína, teobromina) son compuestos que estimulan el Sistema Nervioso Central; es decir, apuntalan al esfuerzo físico e intelectual.
Todo esto, en el Día Nacional del Mate, en MATEAR.
Desde hace dos años, los argentinos celebramos el Día Nacional del Mate. La combinación de valores sociales, histórico – culturales y saludables de la infusión y su relación intrínseca con el prócer Andrés Guacurarí y Artigas impulsaron, en el año 2016, que se apruebe en el Congreso de la Nación la Ley 27.117, estableciéndose el 30 de noviembre como “Día Nacional del Mate”.
De familia guaraní, “Andresito” nació el 30 de noviembre de 1.778 en Santo Tomé (Corrientes) y gobernó la denominada Provincia Grande de las Misiones, el territorio de la Ilex Paraguariensis (yerba mate), ampliamente consumida y difundida por sus efectos benéficos físicos y espirituales.
La norma fue publicada en el Boletín Oficial en febrero de 2016, marcando un importante precedente en la jerarquización del alimento, otorgándole un merecido lugar.