Productores yerbateros de la zona de Andresito expusieron ayer en el Instituto Nacional de la Yerba Mate (Inym) sobre su padecimiento con la enfermedad conocida como “el mal de la tela” que afecta sus yerbales. El perjuicio económico se da con el ataque de un hongo que vuelve negras las hojas de las plantas y posteriormente facilita su caída.
Ayer -también en la reunión con directivos del Inym- estuvo un representante de un producto químico que al parecer permite controlar o bajar la incidencia del ataque fúngico. También acompañaron una investigadora local y el director del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) en Misiones Octavio Ingaramo.
“No hay datos concretos de las héctareas afectadas, sí se tiene conocimiento de que además del ataque de las plantas, se da más en yerbales que tienen poca fertilización o sufrieron más la erosión de los suelos”, comentó Sergio Delapierre, director representante de Secaderos en el Inym.
El directivo detalló que en los últimos días conocieron que la enfermedad del mal de la tela afectó otras zonas: “Me han pasado una foto de la zona Centro donde se ven hojas afectadas por este hongo”, precisó Delapierre a la prensa.
Se relató además que por la enfermedad se realizaron consultas a nivel internacional, ya que hay mayor conocimiento sobre el ataque de hongos en laboratorios especializados de países como Corea del Sur.
La afectación del mal de la tela en la zona Norte está causando gran preocupación entre productores yerbateros. Es que estiman que si el clima lluvioso continúa la enfermedad seguirá haciendo más daño. Y a esto se suma la caída de hojas que también se observa en diversas zonas de la provincia.
La lluvia y la caída de hojas
Otro de los problemas que enfrenta la yerba mate está también relacionado con el clima lluvioso de las últimas semanas. A mayor cantidad de agua caída, es mayor la posibilidad de que las plantas de yerba tengan caída de hojas. El fenómeno ocurrió en 2017 con fuerza y produjo pérdidas de hasta el 60% en algunos yerbales de la zona Norte. Para el productor Luis Munaretto, una de las claves para atenuar este problema es tener el suelo de los yerbales protegido. “Hemos observado que los yerbales con suelos más limpios o por ahí donde se aplicó herbicida en exceso, fue donde luego más se cayó la hoja. En nuestro caso tratamos de tener suelos protegidos siempre con una cubierta verde (una gramilla bajo los yerbales), con eso la planta queda más protegida”, explicó el productor de Campo Ramón.
Por otra parte se consignó que como el fenómeno de caída de hojas se comenzó a ver en algunos yerbales, más productores aceleraron la cosecha. “Eso genera problemas de entrega de hoja verde en los secaderos y en la demanda de cuadrillas para hacer la cosecha. Pasa que al hacer todos lo mismo no se da abasto”, indicó.
Piden relevar la cantidad de tabaco que aún resta acopiar
En los últimos días se produjeron demoras en el procesamiento de tabaco burley en la provincia. Según se explicó desde la Subsecretaría de Tabaco de la provincia la tardanza respondió a un ordenamiento del procesamiento de las hojas entre las acopiadoras.
Se detalló que el tabaco seguirá siendo procesado y hasta ayer se habían entregado 22.760.013 kilos del producto.
En tanto se informó que se relevarán junto a las entidades representantes de productores la cantidad de producción que todavía resta procesar.
Desde la Subsecretaría de Tabaco se pidió que los trabajadores se acerquen a las entidades para detallar su situación productiva. Se informó que próximamente habrá una reunión para comunicar las proyecciones en relación a la producción tabacalera hacia el próximo año.
La comunicación obedece que en los últimos días varios productores manifestaron su incertidumbre sobre la proyección de seguir en la actividad el próximo año. Esto ante las estimaciones de las acopiadoras que habían adelantado que en 2020 procesarían menos tabaco burley que en la presente cosecha.