Un cabo de la Policía de Misiones de 35 años permanece detenido por el presunto abuso reiterado de su hija de 7 años. La investigación está siendo llevada adelante por el Juzgado de Instrucción Uno de Posadas,
cuyas autoridades establecieron para hoy la declaración en Cámara Gesell de la menor.
La denuncia fue realizada el 17 de diciembre por la concubina del uniformado y madre de la víctima. La pareja mantenía una relación desde hacía 14 años, hasta que la situación salió a la luz . Ahora, pidió una orden de restricción de acercamiento para el uniformado y la madre de éste, quien la habría amenazado.
Según pudo saber este medio, las primeras alertas para la madre de la víctima llegaron desde la escuela días antes de la presentación policial. Una docente la convocó para manifestarle que la pequeña había tenido comportamientos extraños y que le había relatado situaciones de violencia en el hogar.
Esas manifestaciones eran confusas y no describen lo que en realidad le había pasado a la pequeña, por lo que la maestra sugirió a la tutora que vea a un profesional, consejo que tomó. Más allá de eso, antes de la primera consulta la menor le terminó relatando a su madre lo que había ocurrido.
La denunciante expresó que su hija contó con detalles un ultraje, que ocurrió mientras ella estaba trabajando y la pequeña y su concubino dormían en la cama matrimonial. “La psicopedagoga me dijo después que mi hija le contó lo mismo en la primera sesión y que creía que no estaba mintiendo”, agregó.
Sin embargo, los hechos se habrían sucedido desde que la niña tenía cuatro años.
Por consejo de la profesional “le pedí que se vaya de mi casa y se volvió como loco, empezó a romper todo. Se lo había pedido hasta que estén los informes finales de la psicopedagoga, le expliqué que quería saber el por qué del comportamiento de nuestra hija”, detalló la entrevistada, aunque para entonces ya sabía que su pequeña no estaba mintiendo.
La mujer se tomó con calma la situación porque no quería que pase a mayores. Así, esperó para hacer la denuncia días después, cuando el uniformado estaba trabajando, por lo que la detención se concretó en la Comisaría Séptima de Villa Cabello, donde presta servicios.
Una confesión
La madre de la víctima expresó que previo a esto tuvo una conversación con el acusado, en la cual, a su entender, le terminó confesando los hechos. “Me dijo ‘supongamos que yo hubiese hecho eso, ¿vamos a tirar a la mierda 14 años juntos?’. ‘Cómo que supongamos, vos lo hiciste’, le dije”.
En esa instancia, el efectivo le dijo que en algunas oportunidades abrazó a la niña pensando que se trataba de su pareja, algo totalmente inverosímil por las fisonomías que tienen madre e hija. “Ahí supe realmente que era verdad, porque me contó lo mismo que me había dicho mi hija”, concluyó.
Sin embargo, eso no fue todo. La denunciante agregó que una vez que el cabo quedó detenido la menor se sintió más segura y empezó a relatar otros hechos de abusos, en otros lugares, como en una pileta. “Varias veces dijo -la niña- que él la amenazaba con el arma, que nos iba a matar a todos si contaba algo”, consignó.
La mujer se mostró conforme con el avance de la causa, pero expresó sus temores de que el efectivo sea protegido. También describió que se siente amenazada por la familia del acusado, quienes retiraron la llave de su vivienda en la comisaría donde está detenido.
“Un día llegué a mi casa y habían abierto las perillas del gas y también estaba rota la puerta de mi auto, de donde me robaron los papeles. Los únicos que pudieron haber entrado fueron ellos, no hay otra”, recordó. Dice que se siente insegura en su propia casa y que no es justo de que tenga que estar pendiente de que puedan volver.
En la actualidad la denunciante está constituida como querellante, lo que le permite tener acceso al expediente -algo que aún no ocurrió- y solicitar pruebas. La audiencia indagatoria se concretó antes de fines del año pasado, aunque no trascendió si el efectivo policial decidió abstenerse o declarar.
Por último la mujer denunció que el acusado tendría un trato privilegiado por parte de sus colegas, debido a que lo vieron sin esposas y moviéndose con total libertad en el Juzgado.
FUENTE EL TERRITORIO