El reviro nació a fines del siglo XIX, en la provincia de Misiones, una región de Argentina ubicada en el noreste del país. Limita con Paraguay al oeste y Brasil al este, de norte a sur, y al suroeste con la provincia de Corrientes, una de las tierras guaraníes.
El reviro apareció en la época de los mensú.
Mensú es el nombre que recibe el trabajador rural de la selva de la región paraguaya y las provincias argentinas de Corrientes y Misiones, y en particular, el trabajador de las plantaciones de yerba mate.
El término original guaraní proviene de la palabra española para mensual, que hace referencia a la frecuencia del pago de los salarios. Históricamente, el trabajo de los mensúes era considerado trabajo esclavo.
Entre los mensúes de los yerbatales (o yerbales), las plantaciones de yerba mate, era muy común preparar el reviro.
El reviro era rápido de preparar y proporcionaba la suficiente energía para ayudar a hacer frente al duro día de trabajo en los yerbatales.
Una hipótesis concreta y realista dice que reviro nació del hecho de que los dueños de los yerbatales nunca alimentaron a mensúes. Podían pasar meses en el trabajo, de la mañana a la noche, sin recibir atención o alimentos de sus patrones. Los únicos dos alimentos que siempre estaban disponibles eran la harina y la grasa. Un día, por necesidad, los mensúes decidieron elaborar la masa del reviro haciendo uso de los pocos ingredientes disponibles para preparar un desayuno que aportara mucha energía.
Pero también existe una leyenda sobre el nacimiento de reviro. Cuenta la historia de una madre que estaba llorando, afligida porque no tenía los medios económicos para ofrecer buenas comidas a sus hijos. Dejó que sus lágrimas cayeran en la olla de harina que estaba revolviendo. Sus lágrimas aportaron suficiente humedad a la harina para hacer una masa, y así nació el reviro.
Este reviro, considerado “el pan de los pobres”, a menudo iba acompañado de cocido. El cocido es una bebida amarga, similar al mate pero más suave, con las mismas propiedades estimulantes y nutricionales. Sin embargo, a diferencia del mate, el cocido se infunde en agua caliente. Hoy también se vende en paquetes, como bolsitas de té o té de hierbas, para poderlo preparar rápidamente, como el té.
A veces, el reviro reemplaza el pan en las comidas, especialmente en el desayuno o el almuerzo, acompañado de carne picada o un huevo frito. Se puede servir en versión salada o dulce, aunque la versión salada es la más popular.
Vale aclarar que buscando información también se dice que el reviró nacio en Paraguay o España también conocida como miga alli, los misioneros la adoptamos ,como algo bien característico de la zona.
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