Finalmente ayer se hizo presente en el Hospital Pediátrico de Posadas la madre de la niña que lleva un año abandonada en el centro de salud. Pero no hubo novedades del progenitor.
La mujer llegó al centro asistencial luego de que El Territorio diera a conocer el caso de abandono por el que transita la beba de 14 meses de edad.
En el Pediátrico, la madre -que también es menor de edad, una adolescente-, mantuvo una reunión con la gerenta asistencial, Liliana Fernández Sosa.
“Se apersonó la mujer y fueron al juzgado a hablar con la jueza que lleva adelante el caso y ahora empezaría la revinculación de la mamá con la niña para empezar a formar el apego de madre a la hija”, contó Fernández Sosa a Radioactiva 100.7.
La médica comentó también que al no hacerse presente en todo este tiempo ningún progenitor ni otro familiar, se decidió judicializar a la niña.
“Desde el momento en que ya no tenía el cuidado de la madre o familiar se notificó a la Justicia y se conformó un expediente primero en el Juzgado N° 2 y ahora en el N° 3. Lo bueno de todo esto es que podemos tomar decisiones de restablecer el vínculo con la madre, aunque sea adolescente, y darle esa oportunidad o si la madre decide darla en adopción, pero eso es algo que se dará en la Justicia y no lo decidiremos nosotros”, sostuvo.
Futuro de la niña
En un primer momento, desde la Defensoría de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes de la provincia, que conduce Miguel Molina, se presentó un escrito ante la jueza actuante para institucionalizar a la menor.
“La jueza buscó a la madre y tampoco encontraron a más parientes. Y nos pidieron desde el hospital que hagamos algo porque no puede estar una niña en un hospital tanto tiempo y la solución que encontramos es el acogimiento en una familia solidaria”, dijo en un primer momento Molina.
Ahora, con la aparición de la madre, las cosas cambiaron, y el abanico de opciones sobre el futuro de la niña se amplió. Una opción es buscar la revinculación con la madre, algo que los especialistas ven difícil ante tantos meses de no tener contacto con la beba.
“Consideramos que primero la progenitora deberá acreditar que está en condiciones de garantizar los derechos de la niña”, explicaron.
Además este medio supo que la Defensoría presentó ayer una segunda propuesta a la Justicia. “Si no se está de acuerdo en que la niña vaya a una familia solidaria existe una plaza en un hogar residencial que, como funciona con una estructura de casas, puede ser adecuado para ella”, expresaron.
Así, la idea central continúa siendo la institucionalización y posterior declaración de adoptabilidad de la pequeña.
Estado de salud
Sobre el estado de salud de la niña, Fernández Sosa indicó que “ella en este momento es una nena que tiene un retraso madurativo leve, se para sosteniéndose. Tenía una traqueotomía que se retiró. Además tiene parte de la alimentación por sonda nasogástrica porque tiene que recuperarse nutricionalmente por el trastorno leve de la deglución, pero por lo pronto está muy bien”.
Y detalló sobre la personalidad: “Es muy viva y simpática, no tiene ninguna medicación y para nosotros es un solcito por todo lo que tuvo que pasar en su vida en tan poco tiempo. Se formaron muchos vínculos con los enfermeros porque ella se hace querer mucho. Es el centro de atención del grupo de Enfermería que se organiza para que el que esté menos contaminado la pueda atender para no contribuir a generar un cuadro infeccioso y es por eso que está con su cuidador constantemente”.
En esa línea insistió en que la nena ya está de alta médica, pero al no presentarse ningún familiar permaneció allí. Sobre los cuidados que deberá recibir de forma ambulatoria una vez que egrese, precisó: “Ambulatoriamente seguiríamos con la estimulación, con las terapias, educación, fonoaudiología. Nosotros podemos ir transitando la recuperación de su retraso madurativo porque estuvo casi 210 días en terapia intensiva, entonces no es el mismo estímulo que recibió otro nene para su edad”.
fuente: el territorio