Un hombre de 66 años fue condenado este jueves en la ciudad de Santa Fe a la pena de 13 años y seis meses de cárcel por haber cometido delitos contra la integridad sexual de su nieta, en hechos ocurridos cuando asistía al jardín de infantes y en su adolescencia.
Tras la sentencia, la fiscal Alejandra Del Río Ayala, que había pedido una pena de 17 años, se mostró conforme con la decisión del tribunal.
Andrada fue condenado como autor penalmente responsable de los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante agravado, en concurso real con abuso sexual simple agravado, explicaron las fuentes.
En ambos casos, el agravante fue el vínculo y haber sido cometido contra una persona menor de 18 años aprovechando la situación de convivencia preexistente.
El tribunal también dispuso que cuando quede firme su sentencia, se realice el traslado del condenado a una unidad penitenciaria, a raíz de que, en la actualidad, cumplía una prisión preventiva domiciliaria.
Al respecto, la fiscal Del Río Ayala, de la Unidad Fiscal Especial de Violencia de Género, Familiar y Sexual (Gefas), dijo que si bien había solicitado 17 años de prisión, «la decisión de los magistrados de imponer 13 años y seis meses es razonable y justa”, aunque aguardará «los fundamentos del tribunal para analizar los pasos a seguir”.
“Los abusos que se investigan se iniciaron en 2007, cuando la víctima era muy pequeña», explicó la fiscal y contó que «en una oportunidad, en la que Andrada fue a buscar a su nieta al jardín de infantes al que asistía en la ciudad de Santa Fe, abusó de ella”.
Finalmente, Del Río Ayala añadió que «aproximadamente 10 años después, en el marco de la convivencia entre ambos en una vivienda ubicada en la localidad de Laguna Paiva, Andrada abusó de la menor, aprovechando un momento en el que estuvo a solas con ella en la casa que compartían”.
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