Los propietarios de los dos natatorios cubiertos de esta ciudad, Neptuno Centro de Actividades Acuáticas y Academia Acuática Tiempo Libre, elaboraron un protocolo junto a las autoridades comunales y finalmente fueron autorizados para volver al trabajo.
“Con Fabián (Soza, de Tiempo Libre) pudimos lograr el Protocolo Municipal de Natación. Estamos muy contentos”, confirmó Gustavo Lingenfelder, propietario de Neptuno. “En el transcurso de la semana recibiremos la inspección y certificación para habilitar las actividades acuáticas controladas. Si Dios quiere, reiniciamos el próximo martes 13 de octubre”, adelantó.
Las clases de natación, rehabilitación y gimnasia en el agua, entre otras estarán destinadas a la población de 12 a 60 años. “La habilitación está basada en el protocolo provincial, con algunas modificaciones como las edades (el inicial decía de 14 a 60) y la posibilidad de usar el vestuario dos a la vez. Aparte, por las dimensiones de la pileta, sólo pueden estar 12 personas por turno”, detalló Matías Frick, director de Asuntos Jurídicos de la Comuna.
Por su parte Nelsson Fabián Soza, aclaró que ahora están con refacciones, por lo que no podrán trabajar ahí, pero agradeció la posibilidad que les dieron los dueños de Neptuno de disponer de un horario para clases de aquagym.
“Para las clases deben presentar certificado médico apto para la actividad física y los adultos mayores deberán presentar una declaración jurada. Serán sesiones de 45 minutos. Deberán llegar ya con las mallas puestas, al finalizar tendrán un mínimo de tiempo dentro del vestuario para cambiarse. Llegarán y se retirarán con barbijo puesto. Firmar la planilla y usar alcohol en gel”, detalló.