la campaña de vacunación arrancó esta mañana con la inoculación de médicos y enfermeros en hospitales de buena parte del país. Pero los más altos funcionarios nacionales no pudieron aplicarse la Sputnik V: Alberto Fernández y el ministro de Salud, Ginés González García, son mayores de 60 y para su rango etario la vacuna rusa todavía no fue aprobada en la Argentina.
Por el mismo motivo, tampoco puede vacunarse aún Cristina Kirchner. Fuentes oficiales reconocieron que no llegó de Rusia la documentación con la información para que las autoridades sanitarias locales puedan autorizarla para esos grupos.
El propio González García, en una charla casual con enfermeros y personal de salud -que quedó captada por las cámaras en el video de 27 minutos que publicó Presidencia en sus canales oficiales- relató detalles de la situación. Dijo que Fernández «está nervioso» porque todavía no llega toda la documentación de Rusia para la Sputnik V en mayores de 60 y que el mandatario optó por no acercarse a los centros de vacunación hasta que no pueda, él mismo, aplicarse la vacuna rusa.
«Ahora (el Presidente) está nervioso porque no llegan los papeles del estudio (en personas de más de 60 años). El estudio es el mismo, lo que pasa es que el número de casos tiene que ser mil y pico y quieren ampliarlo un poco más. Pero (los ensayos) salieron con la misma efectividad, con la misma cantidad de anticuerpos. Yo calculo que es cuestión de días», dijo el ministro de Salud en el Hospital Posadas. Y agregó: «(Fernández) decidió que hasta que no pueda vacunarse, no quiere hacer ninguna imagen con esto (por la campaña de vacunación). Yo también me voy a vacunar cuando me toque». El jefe de Estado tampoco había querido asistir a Ezeiza cuando arribaron las 300.000 dosis de Moscú.
Fuentes oficiales señalaron a LA NACION: «Tenemos la información que Rusia ya autorizó para mayores de 60. Pero formalmente estamos esperando la documentación, que seguramente llegará esta semana. Cuando llegue, autorizará la Anmat».
Los ensayos de la vacuna rusa en mayores de 60 ya le habían generado traspiés al Gobierno. Cuando hace 12 días Vladimir Putin dijo a la prensa que la Sputnik V todavía no estaba aprobada para mayores de 60 años, sus declaraciones provocaron un cimbronazo en lo más alto de la Casa Rosada, al punto que llegó a correr una versión errada advirtiendo que se podía suspender toda la misión con Moscú. Los funcionarios argentinos que estaban tramitando las dosis con el Kremlin, sin embargo, ya tenían esa información. Y avanzaron igualmente con las gestiones para traer la vacuna a la Argentina, porque estaba previsto iniciar la inoculación en el personal médico, tal como se observó hoy.
Vacunación en Provincia y Ciudad
La provincia de Buenos Aires hoy dispuso iniciar la campaña en el Hospital San Martín, de La Plata. Allí, el gobernador Axel Kicillof optó por vacunarse y difundir públicamente esa imagen. «Es un día realmente emocionante, para los que nos dimos la vacuna y para quienes la aplicaron. Es uno de los primeros momentos de alivio desde que se inició la pandemia. El día de hoy marca el inicio de una nueva etapa», dijo el gobernador en una conferencia de prensa, en la que reveló que dialogó con Fernández tras aplicarse la Sputnik V.
El gobierno porteño, en tanto, aplicó las primeras dosis a los equipos de terapia intensiva del Hospital Argerich. Al igual que Fernández, Horacio Rodríguez Larreta no se hizo presente en el lugar. En Uspallata señalaron que quisieron evitar «politizar la vacunación» y en cambio dejar la comunicación en un «nivel técnico». «Horacio no se vacuna porque la campaña de vacunación la dicta el ministerio de salud, que recomendó que el primer grupo esté integrado por los trabajadores de la sanidad que están más expuestos. Él se va a vacunar cuando le corresponda a su grupo», dijeron fuentes del gobierno porteño a LA NACION, en una estrategia distinta a la que se definió en La Plata.
Luego de que se aplicaran las primeras dosis en médicos porteños, el ministro de salud de la Ciudad, Fernán Quirós, reclamó información técnica más detallada sobre la Sputnik V para «generar confianza». «Entendemos que es bueno dar el ejemplo -dijo sobre la vacunación de los funcionarios públicos-. Pero la confianza se logra entregando la información técnica detallada y eso es lo que estamos esperando para estar todos un poquito más relajados y evitar este grado de angustia en la discusión pública», dijo.
Cuando el Presidente dialogó el sábado con los 24 gobernadores, la mayoría dijo que estaba dispuesto a aplicarse la vacuna. No lo harán, sin embargo, todos al mismo tiempo.
fuente: La Nacion (LN)