En la fría mañana de este martes 29, se recordó la fecha del fallecimiento del músico, Teodoro Cuenca, intérprete, compositor de la música autóctona quien es reconocido como el “Padre del Chotis”. El descubrimiento tuvo lugar en la plaza que lleva su
nombre, ubicada en Villa Barreiro.
El artista obereño con una invalorable contribución a la difusión de la “Polquita Rural”, la “Galopa” y el “Gualambo” realizó su último trabajo en el año 1995 “Misiones, la magia de un sueño”. Además, dirigió el grupo Crisol, integrado por músicos misioneros con quienes recorría Misiones. Editó y produjo los trabajos de varios artistas de la zona con su sello Sonoro. El Senado de la Nación le rindió homenaje “por su contribución a la riqueza y difusión de las expresiones de la música regional”.
La ceremonia estuvo encabezada por el Intendente, Carlos Fernández quien junto Liliana Cuenca, hija del reconocido músico; donde participaron también Teo Acosta, presidente del grupo Amigos de lo Nuestro; el cantautor Claudio Bustos; el director
municipal de Cultura, Educación y Juventud, Darío Rodríguez y la jefa del departamento de Cultura, Gloria Miguel, descubrieron el busto de Teodoro Cuenca en la mencionada plaza.
Además, rindieron homenajes con interpretaciones de sus canciones a cargo del músico, Víctor Peña, palabras alusivas de Teo Acosta y de Claudio Bustos, cerrando el encuentro con un baile de shotis misionero por los bailarines Priscilla Cubilla (ex Guaina del Chámame 201) y Joaquín Pizzutti. La bendición estuvo a cargo por el Padre Matías Aches, Vicario de la Catedral San Antonio.
Conto con la presencia de Concejales de la Ciudad de Oberá, Concejales de la localidad de Garupá, Federación de Colectividades e integrantes del grupo de ballet Costumbres Argentina.