El Gobierno de Japón informó este jueves que no habrá espectadores en los Juegos Olímpicos por el aumento de casos de coronavirus en especial por «el rápido avance de la variante Delta«. El primer ministro nipón, Yoshihide Suga, anunció la decisión después de declarar un nuevo estado de emergencia sanitaria en Tokio.
El estado de emergencia es el cuarto aplicado en Japón desde el inicio de la pandemia, y estará en vigor desde el próximo lunes hasta el día 22 de agosto, lo que coincidirá de pleno con la celebración del evento deportivo que se celebrará entre el 23 de julio y el 8 de agosto.
Suga aseguró en una conferencia de prensa que el Gobierno decidió declarar el nuevo estado de emergencia para «evitar una expansión de los contagios a otras partes de Japón”.
«Dije anteriormente que si íbamos a estar bajo estado de emergencia, deberíamos considerar unos Juegos sin espectadores», había advertido el primer ministro antes de mantener una reunión con el Comité Olímpico Internacional.
Controles a los deportistas
Suga reiteró que las autoridades aplicarán férreos controles sobre todos los participantes extranjeros que viajen a Japón con motivo de los Juegos, desde atletas hasta representantes de comités nacionales y periodistas.
«Todos vienen a Japón después de realizarse dos test PCR y más pruebas de forma diaria tras su llegada, de este modo prevenimos los contagios en Japón. La mayoría vienen también vacunados y estarán controlados porque se desplazarán solo por lugares como sus hoteles y otros sitios indicados con antelación», dijo Suga.
Las fronteras del país asiático estarán cerradas para los turistas durante el evento deportivo.
Cierre de fronteras
Los expertos médicos que asesoran al Gobierno ya habían advertido de que el movimiento de personas provocado por los Juegos, combinado con la circulación de nuevas variantes del virus, supondrá un riesgo excesivo, por lo que recomendaron la celebración del evento a puertas cerradas.
Desde el inicio de la pandemia, Japón nunca ha aplicado el confinamiento obligatorio a toda la población, aunque durante este año tanto Tokio como sus regiones principales se mantuvieron en estado de emergencia sanitaria.
La estrategia del Gobierno se ha centrado en el cierre de fronteras de la isla para evitar el colapso del sistema sanitario, aunque eso no logró impedir que el virus tenga circulación comunitaria ni tampoco el ingreso de nuevas variantes de coronavirus.
Este jueves, Tokio registró 896 nuevos casos de covid, un récord similar al del mes de mayo.
Japón suma más de 813.000 casos de coronavirus desde el inicio de la pandemia, con 14.920 fallecimientos y tiene vacunado al 26 por ciento de su población con al menos una dosis.