Este lunes, la ONU presenta un duro informe científico sobre el calentamiento global, prólogo de la conferencia COP26 en noviembre. Lo enmarcan incendios e inundaciones que asolaron el sur de Europa y el oeste de EEUU.
A sólo 85 días de la conferencia climática en Glasgow y en vísperas de que el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) publique un duro informe, el ministro del clima y jefe de la COP26 del Reino Unido, Alok Sharma, instó a encarar una acción urgente para abordar el cambio climático o el mundo pronto se enfrentará a una “catástrofe“.
“Se ve a diario lo que está sucediendo en todo el mundo. El año pasado fue el más caluroso registrado, la última década la más calurosa registrada”, señaló en declaraciones al Observer.
Calificó el reporte que publicará el lunes la principal autoridad mundial en ciencia climática (IPCC) de “advertencia severa”, hasta ahora, acerca de que el comportamiento humano está acelerando de manera alarmante el calentamiento global y de lo cerca que está la humanidad de un desastre potencialmente irreversible.
“Es por eso que la COP26 tiene que ser el momento en que lo hagamos bien – dijo-. No podemos permitirnos el lujo de esperar dos años, cinco años, 10 años, este es el momento“, insistió.
En medio de los rumores recientes de que la conferencia de Glasgow podría salir a medias, se esperanzó en que su advertencia conmovedora, combinada con un duro informe de la ONU que se presentará el lunes, comience a enfocar las mentes de todo el mundo.
En el último mes, los incendios forestales asolaron el sur de Europa, obligando a miles de personas a abandonar sus hogares en Grecia, Turquía e Italia, y otros países del continente, en particular Alemania y Bélgica, han experimentado devastadoras inundaciones.
En otros lugares, Greenville, una ciudad de la fiebre del oro en California, fue arrasada por los incendios y 25 personas murieron después de que lluvias sin precedentes causaron graves inundaciones en China.
En este contexto, en EEUU las petroleras presentaron una cantidad récord de trámites de permisos de perforación para extraer combustibles fósiles y el Reino Unido también está a punto de llevar a cabo proyectos de combustibles fósiles, después de las críticas sobre los planes para otorgar licencias para nuevos campos de petróleo y gas.
Contradicciones
Los activistas ecológicos advirtieron que los británicos están perdiendo credibilidad en el escenario mundial, después de que los ministros apoyaron el nuevo campo petrolífero de Cambo y se abrieron otras licencias de exploración del Mar del Norte a principios de este año.
Las decisiones se tomaron a pesar de que en mayo la Agencia Internacional de Energía, un organismo de control mundial de la energía, advirtiera que la exploración de nuevos combustibles fósiles debe cesar este año.
El descargo de Sharma fue que “las futuras licencias (de combustibles fósiles) tendrán que adherirse al hecho de que nos hemos comprometido a ir a cero neto para 2050 en la legislación. Habrá una verificación climática en cualquier licencia”.
El funcionario admitió, sin embargo, la existencia de una batalla climática nacional que librar y recordó que en septiembre, el gobierno establecerá cómo el Reino Unido liderará con el ejemplo y alcanzará el cero neto para 2050.
La diputada del Partido Verde, Caroline Lucas, enfatizó ante Sky News que el informe del IPCC “probablemente sea el más importante de nuestras vidas”.
“Enfrentamos absolutamente la mayor crisis que jamás haya enfrentado la humanidad“, manifestó y tras cartón criticó al gobierno del Reino Unido por permitir más campos de petróleo y gas en el Mar del Norte.
Lo cierto es que ya hay cierta fricción política con voces dentro del Partido Conservador, preocupadas por cuánto le costará al contribuyente un cambio hacia una forma de vida más ecológica.
Ante lo cual, Sharma alega que el cambio climático se trata de la vida de las personas y “se reduce al impacto humano muy real que está teniendo en todo el mundo”.
Lo fundamenta en su visita a comunidades, las que, como resultado del cambio climático, literalmente tuvieron que huir de sus hogares y mudarse debido a una combinación de sequía e inundaciones.
Sharma tiene la tarea de persuadir a países como China, India, Rusia, Australia y Brasil para que asuman compromisos y políticas concretas para reducir las emisiones, mientras intenta convencer al Reino Unido, la Unión Europea y otras naciones ricas para que cumplan una promesa de £ 100 mil millones al año en financiación climática para el mundo en desarrollo.
Estuvo recorriendo una treintena de países, incluidos siete en la lista roja, para sostener conversaciones con partes interesadas clave antes de la COP26 en noviembre, lo cual le valió cuestionamientos del Partido Laborista y los activistas ecológicos por la voluminosa agenda viajera y que no se aisló a su regreso a casa debido a una exención ministerial.
El parlamentario laborista David Lammy sostuvo que los informes de que Sharma vuela decenas de miles de millas durante una pandemia son “preocupantes” y demuestran que “es una regla para ellos, otra para nosotros”.
Pero Sharma defendió sus viajes, diciendo que estaba “tirando el fregadero de la cocina” a los esfuerzos por llegar a un acuerdo.
“Cada semana hago una gran cantidad de encuentros virtuales, pero puedo decirles que tener reuniones en persona con ministros individuales es increíblemente vital y realmente impactante”, manifestó.
“Hace una diferencia vital construir esas relaciones personales que serán increíblemente importantes a medida que buscamos construir consenso“.
El corresponsal político de Sky News, Rob Powell, ratificó que la cumbre COP26 de noviembre será un momento clave para que el Reino Unido demuestre que puede lograr compromisos internacionales significativos sobre el calentamiento global.
Y puso de relieve que, antes de unos meses cruciales para la agenda verde de Boris Johnson, también se intensificará el desafío político y diplomático que implica para el gobierno del Reino Unido.