Según la investigación, el hombre pidió dinero prestado a familiares y se habría escapado en un taxi hacia el aeropuerto de Barcelona.
“Te dejo en el hotel lo que te mereces”. Con estas palabras, el argentino Martín Ezequiel Álvarez Giaccio, le anticipó a la madre de su hijo y expareja suya que lo habría asesinado, el 24 de agosto, en un hotel de Barcelona. Al momento, el hombre de 44 años es intensamente buscado por las fuerzas de seguridad.
Conforme a lo informado por las autoridades policiales, el sospechoso tiene permiso de conducir vigente. De todos modos, no contaría con un vehículo ni tiene autos a su nombre. Por otro lado, se conoció que había pedido dinero prestado a sus familiares, días atrás, y que tendría su pasaporte.
Todo indica que el sospechoso habría planificado los hechos y, según la investigación, también podría haber organizado su fuga. Así quedó registrado, en las cámaras de vigilancia del hotel Concordia, el momento en el que Álvarez Giaccio controla que no haya nadie en el pasillo para escapar y, luego, huye del lugar saltando un muro.
El episodio ocurrió cerca de las 22, después de que el hombre pasara a buscar a su hijo por el departamento donde vivía con su expareja “para llevarlo a pasear”. Más tarde, le envió mensajes y videos a la madre del niño diciendo que se arrepentiría de haberse separado de él. Incluso le envió una foto, que sería la última del niño con vida, donde se ve los ve a ambos sonrientes, levantando los dedos pulgares.
Con aquel panorama, fue la misma mujer quien se contactó con la policía para buscar a su hijo, que fue encontrado sin vida en la habitación 704. Según lo trascendido, el padre lo habría asfixiado con una almohada.
El hombre habría huido del hotel Concordia en un taxi rumbo al aeropuerto de Barcelona, según publicaron medios locales. Los investigadores interrogaron, en los últimos días, al taxista que lo habría llevado hacia el aeropuerto.
En base a lo que declarado por el conductor, el viaje finalizó frente a una de las puertas principales de acceso a la terminal 1. Tras abonar la tarifa, le solicitó al taxista que esperara un tiempo hasta que él realizara un pequeño trámite. Sin embargo, pasados 15 minutos sin rastro del pasajero, el chofer decidió dejar el lugar y continuar con su trabajo.
La primera hipótesis de la investigación sostiene que el sospechoso no habría utilizado su documentación para abordar a ningún avión. Esto fue controlado tanto el día del asesinato como en los días posteriores. Por eso, los investigadores aún se encuentran trabajando con las grabaciones de las cámaras de seguridad del aeropuerto.
Al momento, todavía no consiguieron determinar el paradero de Álvarez Giaccio ni pudieron seguir sus pasos dentro de la terminal. Esto se dificultó por las medidas sanitarias por el coronavirus, que obligan a todos los pasajeros a utilizar cubrebocas.
🔴 COL·LABORACIÓ CIUTADANA
Busquem el Martín Ezequiel Álvarez Giaccio com a persona relacionada amb la mort del seu fill a Barcelona.
Si teniu informació truqueu al @112 pic.twitter.com/jLpWlQrhlR— Mossos (@mossos) August 25, 2021
El día del crimen
El 24 de agosto, Álvarez Giaccio había pasado a buscar a su hijo para pasar el día juntos. Tras retirarlo por su casa, el hombre lo habría llevado directamente al hotel Concordia, en la avenida Parallel, en el distrito de Sants-Montjuïc.
“Te dejo en el hotel lo que te mereces” fue la última comunicación enviada. A raíz de los mensajes y videos en forma de amenaza que recibió la madre del niño, la mujer se dirigió al hotel para ver de qué se trataban las advertencias de su expareja.
Una vez en el alojamiento Concordia, el recepcionista le impidió el ingreso al no estar registrada como huésped. Quienes sí pudieron entrar a la habitación 704 fueron los agentes, que encontraron al niño debajo de la cama con la cara violeta. Llegaron cuatro ambulancias y, si bien intentaron reanimarlo, finalmente confirmaron el deceso.
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