El presunto abusador fue arrestado ayer al mediodía en la Estación Transferencia de Quaranta. La denuncia contra el trabajador del volante, de 41 años, fue hecha por una chica de 21 que narró que fue abusada tras tomar un ómnibus frente a un boliche del microcentro
Un chofer de ómnibus de la línea 05 de servicio urbano de pasajeros de la capital provincial fue detenido ayer en la Terminal de Transferencias de la avenida Quaranta acusado de violar a una pasajera de 21 años a quien habría atacado a primera hora de la mañana de ayer en el final del recorrido de la unidad que manejaba, en cercanías a la avenida Roque Pérez, y luego de cerrar las puertas del vehículo para que la víctima no pudiera escapar.
Según pudo saber este medio, consumado el hecho, la muchacha corrió por ayuda desde la mencionada arteria hasta el microcentro y contó que el grave ataque se produjo apenas unos pocos minutos después de haber salido de un conocido local bailable de la calle Buenos Aires.
De acuerdo a la reconstrucción que hizo este matutino en base a fuentes ligadas a la pesquisa, la víctima salió a las 5.30 del boliche céntrico con la intención de regresar a su vivienda, en la zona Oeste de la capital provincial. Para ello no tuvo que caminar mucho ya que la parada de colectivos se encuentra a pocos metros del acceso al mencionado local bailable.
A los pocos minutos, la muchacha abordó un colectivo al que en la denuncia describió como de color amarillo y que utilizó uno de los primeros asientos del coche para viajar, a centímetros del conductor.
Siempre desde el aporte dado por la joven en su presentación ante la Comisaría de la Mujer de la Unidad Regional I, luego de recorrer unas cuadras el colectivero detuvo la marcha del transporte al llegar a la avenida Roque Pérez.Y que sin previo aviso cerró las puertas del coche y se abalanzó sobre la pasajera para consumar el acto sexual.
Luego de ello, la denunciante sostuvo que el trabajador del volante le dio dinero para que se tomara un remís y la dejó salir de la unidad.
Inmediatamente la muchacha corrió desesperada por calle Rivadavia hasta llegar a inmediaciones de la plaza 9 de Julio en donde fue asistida y contenida por un efectivo policial que custodiaba ese momento la zona y una vecina que ocasionalmente pasaba por allí. Y ambos la acompañaron hasta el edificio de la Comisaría de la Mujer, ubicado a metros del lugar sobre calle Félix de Azara, para radicar la correspondiente denuncia.
Entrecruzamiento de datos
Al conocerse el infierno que padeció la joven, desde la Comisaría de la Mujer se informó inmediatamente al Juzgado de Instrucción Tres en turno, a cargo del magistrado Fernando Verón, quien dispuso que se realicen los estudios médicos de rigor a la víctima, como así también la asistencia psicológica, y por sobre todo, que se activen los protocolos de ubicación y detención del responsable del ataque.
En relación a los pocos datos que pudo aportar la víctima en relación a las características físicas del acusado, y que se debieron más que nada al fuerte estado de shock que tenía la muchacha a causa de la traumática situación, se pudo recolectar que el trabajador del volante sería una persona delgada y de tez morena.
Pero entre los aportes que horas más tarde fueron clave para la ubicación del presunto atacante se destacaron las imágenes de una cámara de vigilancia de la Policía de Misiones que registró el momento en que la chica subió, frente al citado boliche, al interno 252 de la línea 05 perteneciente a la empresa Tipoka.
Esto hizo que desde la Justicia se solicitara la colaboración a la mencionada empresa con los libros en donde constan los recorridos y los conductores abocados a cada línea. Y tras la entrega de estos datos, más otras averiguaciones realizadas por la Policía de Misiones, se logró identificar al supuesto depravado.
Fue así que minutos después de las 12 del mediodía de ayer, una comisión policial aguardó el arribo de la citada unidad a la Terminal de Transferencia de Quaranta en donde luego de sacar de circulación a la misma se dispuso el arresto de su conductor.
Este fue identificado como César Augusto A. (41), quien de inmediato fue trasladado a la Comisaría de la Mujer UR-I, en donde pasó por la revisión médica y luego se le secuestró el teléfono celular para pericias.
Fuentes ligadas al caso indicaron que el aparato secuestrado tenía la pantalla rota, lo que podría hacer suponer a los pesquisas que dichos daños se habrían producido en medio de un intenso forcejeo con la víctima.
Por otro lado, se espera que el próximo lunes el chofer sea llevado al juzgado para la correspondiente audiencia indagatoria.
En tanto que hasta el cierre de esta edición no habían trascendido los resultados de los estudios médicos realizados a la joven y se añadió que una vez que se recupere del díficil momento será llamada a declarar.
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