Para los fieles católicos, el 2 de noviembre es un día de gran importancia, se conmemora el Día de los Fieles Difuntos, que busca honrar el recuerdo de quienes ya no siguen en la vida terrenal.
Por ese motivo, hoy, miles de personas en todo el mundo visitan los cementerios para honrar la memoria de sus seres queridos, y de todos aquellos que partieron al encuentro con Dios.
En este marco, en el cementerio La Piedad se llevaron a cabo cinco misas presididas por el Cura Párroco de la Parroquia San Antonio, Miguel Ángel Moura. Allí, algunos vecinos vieron al gobernador de Misiones Oscar Herrera Ahuad, sin escoltas, como un ciudadano más entre el montón que acudió a las celebraciones.
En sus manos el gobernador llevaba una flor de girasol que ofreció como ofrenda en tributo a las y los misioneros que partieron de la vida terrenal. Como uno más, en silencio y con profundo respeto, solo, sin escoltas rindiendo homenaje a los difuntos. Con la simplicidad y compromiso que lo caracterizan, Herrera Ahuad, demuestra día a día su labor y esfuerzo en pos de garantizar el bienestar, acompañamiento e igualdad de oportunidades para todos los Misioneros.