La historia de contrastes con final feliz ocurrió en la ciudad española de Las Palmas. El hombre afortunado se quedó con 400.000 euros del primer premio. “Todos los años vengo a comprar aquí y salió sorteado el último número que elegí”, dijo el ganador en el shopping donde adquirió el billete.
La tristeza de una pareja de la ciudad española de Las Palmas porque el marido se había quedado sin empleo duró apenas 24 horas, luego de enterarse que habían ganado los 400.000 euros del primer premio del Gordo de Navidad.
El Centro Comercial El Mirador, ubicado en la mencionada ciudad ibérica, fue el epicentro de una historia de festejos. Allí se repartieron en total 161,42 millones de euros, que se dividieron entre una gran cantidad de ganadores que acertaron el número 86.148. El sorteo de este año se convirtió en el Gordo de Lotería que más dinero dejó en un solo punto de venta de la región.
Tras conocer la noticia, el afortunado que había perdido su empleo apenas 24 horas antes se acercó al centro comercial para agradecer el premio a los trabajadores de su administración de lotería.
El hombre llamado Antonio había comprado el billete 15 días antes del sorteo y, frente a los medios de comunicación no pudo esconder su incredulidad por ser el protagonista de esta llamativa historia de contrastes.
Entre lágrimas y abrazado a su pareja, el hombre explicó que “todos los años vengo a comprar aquí y fue el último número que compré”, según publica la cadena COPE.
El ganador estaba muy conmovido, porque tras perder el empleó creyó que ya no podría pagar el alquiler del departamento en el que vive junto a su familia. Sin embargo, el suculento premio les permitirá dejar de ser inquilinos para convertirse en propietarios.
En este sentido, Antonio afirmó: “Anoche nos acostamos con la ilusión de ganarnos algo, no esto, pero algo pequeño que nos diera para comprarnos una casa porque llevamos toda la vida viviendo de alquiler. Cuando supimos que éramos los ganadores solo podíamos llorar y gritar de emoción”.
Por su parte su esposa Yasmina, que vio en en televisión el sorteo y saltó de la emoción al confirmar que su número era el ganador, afirmó: “Parece que estoy soñando. Este premio ha sido una bendición”.
Además de Antonio, otra ganadora fue una enfermera llamada Lali, que trabaja atendiendo a domicilio a sus pacientes.
“Estaba desayunando con un paciente y escuché que había caído el premio en la administración del Centro Comercial Mirador, me levanté, lo miré en el celular y sí, era mi número. Grité como una loca y pregunté dos veces porque no creía lo que estaba pasando”.