Ataque a balazos contra la sede de Colón el jueves pasado, en un claro intento de demostración de fuerzas de los barras sabaleros que pretenden entradas de favor para asistir al torneo de la Liga Profesional, a los que se sumarán a la Copa Argentina y más adelante a los de la Copa Libertadores.
La puja interna de la barra parece inocultable aunque no se trata de un hecho nuevo. Pero sí preocupa porque los sectores en pugna podrían unir sus fuerzas en el reclamo contra la dirigencia que encabeza José Vignatti.
Esta mañana, el portón 7 del estadio colonista apareció pintado con la leyenda: “Entramos todos o no entra nadie”, en clara alusión a lo que sucedió el jueves pasado en Paraná, donde supuestamente un sector de simpatizantes pudo estar en el estadio de Patronato, cuando Colón derrotó 3-1 a los mendocinos de Godoy Cruz.
Aunque los dirigentes se mantienen en silencio, nadie oculta que lo sucedido desde el jueves pasado hasta hoy es una clara advertencia de que puede llegar a pasar el sábado venidero, cuando Colón tenga que jugar nuevamente “de local” en la cancha de Patronato, ante Barracas Central, ya que el estadio en el barrio Centenario, al sur de esta capital, sigue estando bajo tratamiento especializado para renovar su césped.
Lo sucedido el jueves está siendo motivo de investigación por parte de la policía local pero no hay detenidos. Esa tarde, casi a la misma hora en la que comenzaba el partido de Colón en Paraná, dos hombres que iban en moto dispararon contra una ventana de la sede administrativa del club y realizaron pintadas en el piso. En la vereda se leía: “Dirigentes entramos o no, eh”. Además, arrojaron papeles con códigos QR para socios del club Colón, cuyo propósito se desconoce.
Según se comentó ese mismo día, uno de los grupos denominados “disidentes” de la hinchada no pudo llegar hasta el estadio de Patronato ya que la policía de Entre Ríos detuvo los micros y los hizo retornar a Santa Fe “por no poseer la cantidad de entradas en función del número de hinchas que viajaban en el vehículo”. Al no haber podido ingresar en el estadio, retornaron a Santa Fe y armaron la estrategia de amedrentamiento con el ataque a la sede del club.
Este lunes, supuestamente en un intento de hacer “recordar” del anterior reclamo, realizaron una nueva pintada de advertencia, a modo de amenaza.
Se descuenta que los dirigentes, muchos de los cuales viajan a Santiago del Estero donde Colón se enfrentará este martes con Central Córdoba, mantendrán en las próximas horas reuniones con las autoridades policiales para adoptar medidas de prevención y custodia de la sede y los ingresos al club, como también el operativo de traslado de simpatizantes para el cotejo del sábado en la capital entrerriana.
fuente LANACION.COM.AR