El trabajo policial y judicial echó luz a un proceso que, por la incertidumbre generada por el hecho, se vio teñido de múltiples noticias falsas y acusaciones inverosímiles que solo buscaban obtener un pequeño rédito político.
La detención y confesión de Andrés Texeira fue el punto cúlmine del trabajo realizado por la Policía de Misiones junto a los miembros del Poder Judicial que tienen la causa que investiga lo sucedido con Josías Galeano, el adolescente obereño que había sido con visto con vida el último 30 de abril.
Texeira fue detenido en San Vicente (donde se encontraba “tarefeando”), confesó que asesinó al joven e indicó el lugar donde estaría el cuerpo. Allí se dirigió el Juez de Instrucción Dos, Horacio Alarcón, junto a peritos de la División Criminalística de la UR II y de la Secretaría de Apoyo para Investigaciones Complejas (Saic). Efectivamente, en el lugar descripto por el sospechoso había un cuerpo en avanzado estado de descomposición. En un bañado situado en el barrio San Miguel, en el límite con Villa Stemberg, se encontraron los que serían los restos de Josías Galeano.
Las pistas que llevaron a la detención de Texeira resultaron en la clave del caso hasta el momento, este hombre de frondoso prontuario penal (robo, hurto y estafa) había sido visto junto al joven en el momento de su desaparición.
La desaparición de Galeano, y el vínculo con personajes como Texeira, aceleraron todo tipo de especulaciones, falsos testigos y múltiples fake news. Lo que complicó el accionar policial y judicial, que de todos modos ha podido brindar soluciones y llegar a la verdad en este caso.