Un abogado obereño se presentó ante la Seccional Primera y denunció el robo de 150 mil pesos en efectivo que tenía guardados en su camioneta. Pero más allá del perjuicio económico en sí mismo, el profesional alertó que para perpetrar el hecho se habría utilizado un inhibidor de frecuencia que bloqueó el cierre centralizado del rodado, lo que pasó desapercibido para el dueño hasta que notó el faltante del dinero.
El hecho se registró el último vienes, alrededor de las 20, sobre avenida Beltrame, de Oberá, circunstancia en que Silvio C. (49) se dirigió a un conocido supermercado de la zona.
En tanto, el ilícito recién fue detectado el sábado en horas de la mañana, según preció el damnificado.
En su denuncia, mencionó que el pasado jueves adquirió la suma 150 mil pesos discriminados en billetes varios, monto que colocó dentro de un maletín de tela gris que dejó en el asiento trasero de su camionera Volkswagen Amarokcolor gris, dominio OVB-254.
Ese día y el siguiente realizó sus actividades normales por diferentes puntos de la ciudad de Obera, entre ellas una compra que efectuó el viernes por la noche en un supermercado de avenida Beltrame. Recién al otro día, alrededor de las 9, se dirigió al garaje de su domicilio para retirar el maletín y al revisarlo descubrió que estaba vacío.
En la denuncia dejó constancia que sospecha que el robo se produjo al dejar estacionado el rodado en avenida Beltrame, ya que al regresar al mismo lo encontró desllaveado, lo cual en primera instancia creyó que se trató de un descuido.
Tecnología delictiva
Asimismo, expresó la posibilidad de que el o los autores del hecho hayan usado un inhibidor del sistema de alarma y cierre centralizado de la camioneta Amarok.
Desde la Unidad Regional II informaron personal de la División Investigaciones se halla verificando la existencia de cámaras de seguridad en la zona y que por el momento no hay sospechosos.
Al respecto, el propio damnificado comentó e insistió con que el robo fue posible porque “usaron un inhibidor de frecuencia”, al tiempo que sede policial le dijeron que tuvo “suerte que no se llevaron el auto, lo que es habitual, y que unos días antes intentaron robar un auto así frente al banco Macro del centro”.
“Estos delincuentes trabajan en horarios pico y en lugares concurridos. Te bloquean el cierre centralizado y pensás que cerraste el vehículo, pero no es así”, alertó.
Y agregó: “La Policía debería prevenir porque ya hace tiempo que estos delincuentes operan en supermercados. Así que no debe ser difícil atraparlos”.
El pasado 26 de junio delincuentes desconocidos irrumpieron en la distribuidora Pawluk, de Oberá, donde forzaron una caja fuerte para robar 16 millones de pesos, ocasión en la que también habrían utilizado un inhibidor para desactivar la alarma, lo que marca que la delincuencia también se apoya en avances tecnológicos.
Fuente, El Territorio.