El expediente, al menos por ahora, la tiene como imputada por “abandono de personas”, acusación que podría agravarse tras las testimoniales que están previstas para la mañana de este martes.
Por orden del Juez de Instrucción Tres de Posadas, Fernando Verón, continúa detenida la mujer de 30 años que fue acusada de abandonar y maltratar a sus hijos menores de 6 y 9 años, en una vivienda del barrio Itaembé Guazú.
Afortunadamente, los menores están al cuidado de una tía y su abuela con domicilio en la ex capital provincial y, en contacto con Misiones Online, mencionaron que los niños están ahora en buen estado de salud y recuperando de a poco “la sonrisa”.
Durante el correr de la mañana de este martes, familiares y vecinos de la mujer de 30 años desfilarán por los pasillos del Juzgado de Instrucción Tres para declarar en la causa y sumar testimonios al expediente.
La acusada fue imputada provisoriamente por “abandono de persona”, situación que podría agravarse luego de conocerse los testimonios de las personas cercanas a la mujer con domicilio en el barrio Itaembé Guazú. No se descarta que pudiera ser excarcelada.
“Se escapaban por la ventana para pedirle comida a los vecinos”
El testimonio de vecinos revela una situación de encierro y falta de cuidado por parte de la madre. Según uno de ellos: “Siempre estuvieron los chicos encerrados, ella nunca estaba, por ahí se le veía, venía, se cambiaba la ropa, tenía visita un rato se iba y los chicos seguían encerrados”.
El abandono de los niños se evidenciaba cuando intentaban buscar ayuda en el barrio. Algunas veces se escapaban por la ventana y pedían comida a los vecinos o se refugiaban en otras casas.
Los testigos relatan situaciones de hambre y miedo que los menores experimentaban: “Pedían porque tenían hambre, se escapaban directamente por la ventana porque ella los encerraba, cerraba la puerta con llave y se iba y ellos se escapaban por la ventana”.
Aunque los vecinos eran conscientes de la situación, no tenían un contacto estrecho con la madre ni los niños. La falta de comunicación de los niños, posiblemente por el trato que recibían o por miedo, dificultaba obtener más detalles sobre su situación.
La falta de cuidado y la violencia física hacia los menores también fueron denunciadas. Según los testimonios recogidos, la madre agredía a los niños, llegando incluso a agarrar a la niña de los pelos. Los gritos de los niños eran audibles para los vecinos, generando gran preocupación.
Fuente, Misiones Online.