Hubo un apresuramiento para lanzar la información, por ello el vocero presidencial, Manuel Adorni, lanzó un mensaje en la red social X «hubo acuerdo» y luego lo borró. Lo cierto es que Ámbito pudo averiguar que desde el Palacio de Hacienda el ministro de Economía, Luis Caputo, está coordinando con el FMI y el BCRA para tratar de llegar a un acuerdo en el día de hoy.
La misión del FMI arribó al país el viernes y como es habitual, al término de la visita se espera que se emita un comunicado sobre la marcha de las negociaciones. Esto permitiría, ya que se estima desde anoche que hubo un acuerdo, despejar cierta incertidumbre que se vio reflejada en la suba de los tipos de cambio.
Funcionarios del Ministerio de Economía están ultimando detalles con técnicos del organismo.
Además de Luis Cubeddu, subdirector del Departamento del hemisferio occidental, y Ashvin Ahuja, Jefe de la Misión, participó por el organismo multilateral Ben Kelmanson, representante del FMI en Argentina.
Luego del encuentro, el ministro Caputo y el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, concurrieron a la Casa Rosada para mantener un encuentro con el jefe de Gabinete. “Las reuniones deben ir por buen rumbo”, señalaban fuentes oficiales ya que el primer mandatario no participó de ninguno de los dos encuentros.
Según trascendió, la misión buscó interiorizarse sobre distintos aspectos de la marcha del programa argentino, particularmente la situación fiscal y monetaria.
Objetivos del Gobierno
El objetivo principal es renegociar las condiciones del acuerdo, dadas las dificultades en el cumplimiento de los términos acordados bajo la administración de Alberto Fernández y Sergio Massa.
Funcionarios del Ministerio de Economía vienen discutiendo desde que asumieron con los técnicos del FMI las nuevas metas. Una sorpresa fue que “nos plantean nuevas y más duras exigencias, a pesar de que el programa del presidente Javier Milei es mucho más estricto y ambicioso en materia de ajuste fiscal que el acordado con Sergio Massa”, según señaló una alta fuente oficial a este medio.
La evaluación interna del Palacio de Hacienda es que el Gobierno está en condiciones de llevar adelante un severo ajuste en las cuentas públicas. Tanto es así que calculan que -si bien esperan que el Congreso apruebe las distintas subas de impuestos propuestas-, en el hipotético caso que no fuera así, igual se podría cumplir la meta de reducir a 0,9% del PBI el déficit primario, según estaba estipulado en el acuerdo original con el Fondo.
“La intención es seguir con el Programa de Facilidades Extendidas vigente, lograr waivers (perdones) por los incumplimientos y adecuar las metas”, precisó a Ámbito una alta fuente del Palacio de Hacienda.
Una de las hipótesis de trabajo que el presidente Milei conversó con el ministro Caputo, es la posibilidad de llevar el endeudamiento con el Fondo a los u$s 55.000 millones originalmente obtenidos por Mauricio Macri (del que finalmente se recibieron unos u$s 44.000 millones) aunque admiten que no deja de ser una meta ambiciosa. En caso de lograrse significaría un ingreso de divisas para fortalecer las reservas del Banco Central, en unos u$s10 mil millones.
Llamado clave
El primer mandatario delega en sus funcionarios el vínculo con el FMI y por lo tanto no está previsto que mantenga un encuentro con los jefes de la misión, según pudo saber Ámbito. “El vínculo con el FMI está muy bien”, comentó una alta fuente de la Casa Rosada.
Aseguran en el entorno presidencial que el FMI no creyó mucho las promesas de ajuste de Milei en la campaña electoral. Pero cuando estas fueron ratificadas en su discurso de asunción en el Congreso, comenzaron a percibir que posiblemente “esta vez la Argentina hará el ajuste necesario para estabilizar la economía”.
Es más, Gita Gopinath, subdirectora gerente del FMI, se comunicó esta semana con el primer mandatario para ofrecerle venir junto con la misión en una muestra de apoyo. Desde presidencia agradecieron el gesto y prefirieron postergar este encuentro hasta llegar a un entendimiento.
«El acuerdo no es algo que le preocupa al Presidente», comentó a este medio una fuente de su entorno, dado que «el ajuste que planteamos es mucho mayor a las metas establecidas en el acuerdo de Facilidades Extendidas».
El primer mandatario siempre señaló que el objetivo del Gobierno consiste en llevar adelante un programa de ajuste fiscal más severo que el propuesto por el FMI, ya que plantea lograr en el curso de este año el equilibrio no sólo primario (antes del pago de intereses) sino también financiero.
El país viene de incumplir las distintas metas planteadas en el acuerdo reformulado en la anterior administración, tanto en lo que se refiere a la acumulación de reservas como al desequilibrio fiscal.