Recientemente se anunció una importante inversión inmobiliaria en Oberá por parte de una empresa constructora provincial, cuyos propietarios dieron a conocer las características del moderno edificio, lo que implicará una importante inversión económica y generadora de mano de obra. Tras el anuncio -como casi siempre- salieron opiniones de todo calibre, no solo a cuestionar la inversión, sino a hablar de que en Oberá esa obra no se podría realizar por carecer de infraestructura, entre otras desinformaciones y falacias por parte de los señalados anti obereños.
Ello no es extraño ni casual, podría ser por desconocimiento o por mala fe. El ex concejal y actual diputado provincial por el PRO Horacio Loreiro, salió a cuestionar que «en el municipio no se podían construir más de 7 pisos, que no cuenta con servicio cloacal». Todo ello evidentemente desconociendo las características de la edificación, que tiene presentados sus planos en el municipio, Loreiro agregó que bomberos no cuenta con escaleras para atender estas edificaciones en caso de incendios, cuando en los planos está todo previsto.
Pero Loreiro atacó más fuerte al decir que «como siempre, históricamente se están haciendo mal las cosas en Oberá, y que se debería asesorar muy bien a las personas que quieren invertir en Oberá», según el texto de su publicación en redes sociales… El actual diputado obereño al haber sido concejal, debería conocer que la altura máxima de construcción es de 45 metros, y no por cantidad de pisos; es decir que la futura construcción será de 15 pisos y podrían ser de 20 pisos o menos. Y por otro lado el exconcejal debería saber que en la zona de obra cuenta con servicio cloacal y todos los servicios requeridos que demandan este tipo de inversiones en un lugar céntrico. Sería ridículo pensar que una empresa constructora del prestigio como es la de Silvina Ratti, que conocen muy bien del negocio inmobiliario, venga a una aventura de tamaña inversión sin antes haber realizado un estudio de mercado y de factibilidad.
Puede llegar a ser entendible que el diputado Loreiro y los concejales del PRO, ahora devenidos en libertarios por el apoyo incondicional a la gestión del presidente Javier Milei, estén en contra políticamente del intendente Pablo Hassan, pero llegar al extremo de desalentar inversiones en Oberá es un grave error que puede haber ocurrido por desconocimiento o con mala intención, y esto no es un ejemplo de la buena política de ciudadanos de bien que se predica, sino de la mala política, porque no se está descalificando al intendente; se está descalificando a la institución municipal y a la comunidad obereña al señalar que «como siempre e históricamente se están haciendo mal las cosas en Oberá» cuando los obereños han sido pioneros en muchas cosas a nivel provincial; y por citar un solo ejemplo en lo deportivo, el básquet, Oberá tiene un equipo en primera división.
Por otro lado, se puede observar en Oberá una gran cantidad de obras en construcción con destino inmobiliario que son inversiones con una visión a mediano y largo plazo por el tiempo de recupero del capital invertido y el tiempo de construcción. Que además generan puestos de trabajo en forma directa e indirecta, ya que la construcción mueve unos 70 rubros comerciales. Según los datos aportados por la dirección de urbanismo, están en construcción 33 alojamientos; de este total, 12 de ellos son departamentos de 1 a 3 ambientes y de 3 a 8 pisos. Y 21 construcciones de entre 1 y 3 pisos en construcción de monoambientes en diferentes zonas residenciales, destinados al uso de estudiantes universitarios.
Sería bueno ser pro obereño porque los datos erróneos se esparcen rápidamente y ponen en duda a quienes quieran venir a invertir a Oberá. La buena política se hace construyendo con críticas constructivas y no destruyendo con desinformación o malicia. ¿Les molesta el progreso de Oberá?
Un gobierno nacional de ciencia ficción
Es cierto que la inflación cayó abruptamente pero ¿a qué costo? Paralelamente aumentó el desempleo y la pobreza; según los datos la pobreza llegó al 48,9 por ciento, casi la mitad de la población; cuando en diciembre del año pasado estaba en el 41,7 por ciento. Las ventas minoristas cayeron un 18,4 por ciento, y la caída del consumo del 20,4 por ciento interanual. Y la industria trabaja al 50 por ciento de su capacidad instalada, y las proyecciones para los próximos meses no son de recuperación, sino de una mayor caída de la actividad económica, del consumo y del empleo, por ello festejar el 8,8 por ciento de inflación del mes de abril es arriesgado, no son pocos los economistas que advierten que será difícil poder mantener la inflación a esos niveles, y será de un alto costo económico y social.
Mientras tanto, el presidente Javier Milei, junto a un grupo de sus funcionarios más cercanos, viajó en el avión presidencial a España, donde se alojarán en un hotel pagado por el Estado Argentino. Lo reprochable y cuestionable es que el presidente no va a tener ninguna reunión de estado, ni con ningún funcionario español, sino que presentará su libro. Y se reunirá con el presidente del partido de ultraderecha español VOX y dará una charla ante empresarios. Como no va en calidad de presidente, ya que no tendrá reuniones oficiales, tampoco será recibido por el rey, por lo que cada vez se entiende menos por que el estado argentino, en el que supuestamente no hay plata, debe hacerse cargo de los gastos de este viaje de placer del presidente, porque no va en búsqueda de inversores y se calcula en cerca de medio millón de dólares. Es decir con la tuya, como le gusta decir a los libertarios.
El impacto también se advierte en Misiones en los sectores de la producción; a los problemas que tiene el sector yerbatero por la desregulación de la actividad, el sector de la molinería a modo de advertencia comunicó que está cayendo el consumo de yerba mate, lo que explica de alguna manera la caída en los precios, en particular al sector de la producción. El sector maderero por la caída de la obra pública y privada, sumado a la importación de muebles, está en serios problemas económicos y de la disminución de horas de trabajo al sector obrero, pasarán directamente a los despidos.
Además, se suma la falacia del déficit cero, por dar un solo ejemplo hoy el Paraguay reclamó una deuda de 118 millones de dólares por cesión de electricidad, aduciendo que hace cuatro meses que el gobierno argentino no abona el consumo. Existen innumerables ejemplos que desmienten el déficit cero, lo que transforma al actual gobierno en un gobierno de ciencia ficción, del cual muchos son más fanáticos que fundamentalistas, y viven de las fantasías y mentiras que hacen rodar por las redes sociales y las replican convencidos de que son verdades.
Jorge Mielniczuk – Periodista
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