A través del programa Armamos la Huerta Juntos -de la Municipalidad de Oberá- cientos de vecinos implementaron las huertas urbanas en sus barrios. El objetivo es promover en los vecinos la creación de huertas urbanas. Además de promover el autoconsumo de alimentos saludables y la soberanía alimentaria, la iniciativa también instala buenas prácticas de manipulación de alimentos y su completo aprovechamiento.
Este año la Municipalidad llevó adelante el programa Armamos la Huerta Juntos, en un esfuerzo con las comisiones barriales, de manera que este beneficio llegue a la mayor cantidad de familias posible.
La iniciativa está orientada a fomentar el autoconsumo de alimentos saludables y promover la educación agropecuaria dentro de la comunidad. Como resultado, el impacto de esta actividad fue significativo, beneficiando a cientos de personas de 6 barrios de la ciudad. Los barrios donde se implementó este programa fueron San José, Sapucay, Pueblo Salto, Km 0, San Miguel, 100 Hectáreas y Caballeriza. Con miras al futuro, el municipio se propuso continuar con esta propuesta y ampliar su alcance a nuevos barrios de la ciudad.
Huertas urbanas en Oberá: un gran impacto en la comunidad
El programa brindó asesoramiento técnico integral a los participantes. Abordaron temas clave para la creación y el mantenimiento sostenible de huertas familiares. Entre los principales contenidos se incluyeron la construcción de canteros, la preparación adecuada del suelo y la elección de métodos de siembra adaptados a cada tipo de cultivo. Asimismo, se promovió el manejo natural de plagas y enfermedades mediante técnicas ecológicas. De esta manera, muchos horticultores urbanos evitaron el uso de productos químicos, lo que fomenta las prácticas respetuosas con el ambiente.
Otro aspecto fundamental de las capacitaciones giró en torno a cómo transformar los residuos orgánicos en compost. Gracias a esto, los talleristas aprendieron cómo contribuir a la fertilización natural del suelo y a la reducción de desechos en los hogares. Por consiguiente, es importante destacar el aporte técnico proporcionado por la Secretaría de Agricultura Familiar de la provincia.
Paralelamente, el programa también ofreció una serie de capacitaciones complementarias, diseñadas para mejorar el bienestar integral de los participantes. En este sentido, los vecinos accedieron a talleres sobre salud y nutrición, enfocados en la importancia de una dieta balanceada y el consumo de alimentos frescos y orgánicos. Además, se realizaron talleres de cocina práctica, donde los asistentes aprendieron a aprovechar al máximo los productos cultivados en sus huertas.
La manipulación de los alimentos fue otro tema fundamental abordado en los encuentros para garantizar criterios de bioseguridad de alimentos en los hogares. En consecuencia, los participantes incorporaron técnicas de conservación de alimentos y buenas prácticas de higiene para prevenir enfermedades transmitidas por alimentos.