La reducción temporal en los derechos de exportación representará una pérdida fiscal cercana a la mitad del superávit financiero de 2024. La medida se implementará por decreto y las alícuotas se reajustarían automáticamente en julio, sin necesidad de pasar por el Congreso.
El Poder Ejecutivo resignará ingresos fiscales por un monto aproximado de 800 millones de dólares, equivalente al 0,13% del Producto Bruto Interno (PBI). Según el economista Claudio Caprarulo, esto corresponde a menos de la mitad del superávit financiero de 2024, que alcanzó el 0,3% del PBI. El ministro de Economía, Luis Caputo, señaló que eliminar por completo los derechos de exportación requeriría un superávit de 8.000 millones de dólares.
Presión sobre las provincias
El Gobierno busca compensar el impacto de esta decisión incentivando a las provincias y municipios a reducir su propia presión fiscal. Caputo aseguró que esta disminución en retenciones generará un aumento en la recaudación de impuestos coparticipables, lo que redundará en mayores transferencias automáticas hacia las arcas provinciales. «Es momento de que los reclamos se enfoquen en niveles locales de gobierno», declaró el ministro.
La medida llega en un contexto de negociaciones técnicas con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que habitualmente presiona por ajustes en el esquema cambiario. Aunque no se anunciaron cambios en este aspecto, Caputo reafirmó que “el programa económico continuará siendo el propuesto por Argentina”.
Sector agropecuario en crisis
El recorte de retenciones surge en medio de una situación crítica para el agro. Según la Fundación Mediterránea, el precio internacional de la soja promedió 361 dólares por tonelada en diciembre de 2024, un 27% por debajo del promedio histórico de 2002-2023. Este valor es el más bajo desde 2006. Además, en el mercado local, el poder adquisitivo de la soja cayó un 30%.
En 2024, los derechos de exportación representaron entre el 1% y el 1,1% del PBI, una significativa reducción frente a períodos anteriores, donde aportaron hasta el 3,1%. Desde 2002, estas retenciones han oscilado entre el 0,6% y el 13,4% de los ingresos tributarios totales del gobierno nacional.
Reclamos del sector
La Mesa de Enlace agropecuaria acordó recientemente una serie de pedidos al Gobierno, entre ellos:
- La eliminación de los derechos de exportación, que impactan negativamente en la competitividad internacional.
- Un sistema impositivo más equilibrado que contemple las particularidades de las economías regionales y alivie la carga fiscal para pequeños y medianos productores.
- Medidas de financiamiento accesible para fomentar inversiones en el sector.
Aunque el anuncio del recorte busca aliviar parte de estas demandas, los representantes del agro han advertido que es insuficiente para enfrentar el difícil panorama actual.
Para avanzar hacia una eliminación total de las retenciones, el Gobierno calcula que necesitaría un aumento en la recaudación tributaria equivalente a más de un punto del PBI en 2025. Según proyecciones oficiales, un crecimiento del PBI del 5% podría generar ingresos adicionales equivalentes a 1,2 puntos del PBI, aunque los analistas del mercado estiman una expansión más cercana al 4%.
«Es un proceso gradual. No podemos comprometer el esfuerzo de todos los argentinos para alcanzar esta meta en el corto plazo», concluyó Caputo.