Los chicos obereños se olvidaron rápido de la dura derrota ante Atenas y se levantaron más lúcidos que nunca para adueñarse del tercer lugar en el Hexagonal final del Campeonato Argentino de Clubes U17, que se desarrolla en Mar del Plata, al vencer a Independiente de Neuquén por 84 a 78. Gómez Quinteros con 22 puntos y Ramírez con 19 los goleadores celestes. Así los de la Capital del Monte se metieron en la historia del básquet de la tierra colorada frente a todas las potencias.
Antes de la gran final, Oberá e Independiente de Neuquén se enfrentaron para definir el tercer puesto del Hexagonal Final. Fue victoria 84-78 para los de misiones, con 22 puntos 6 rebotes y 5 asistencias de Taiel Gómez Quinteros. Por el lado neuquino, no alcanzó con los 24 puntos y 4 rebotes de Facundo Troncoso.
Oberá hizo la diferencia en el tercer cuarto y parecía en total control del juego (ganaba por 18 al inicio del último parcial). Sin embargo, Independiente jugó un gran cuarto final y le puso suspenso al encuentro.
De todas maneras, el esfuerzo de los neuquinos no fue suficiente y tanto el triunfo 84-78 como el tercer puesto en el Argentino de Clubes U17, quedaron para Oberá.
ATENAS BICAMPEÓN U17
Atenas de Córdoba fue superior y venció 78-64 a Peñarol en la final del Hexagonal Final del Argentino de Clubes U17 para coronarse nuevamente campeón de este certamen. Los cordobeses, de la mano de Franco Baralle y Juan Ignacio Jure, tomaron el control del juego en el primer cuarto y supieron contener al muy buen equipo de Peñarol durante el resto del encuentro.
En Atenas, Jure, terminó con 22 puntos y fue el goleador del partido, mientras que Baralle colaboró con 17 puntos más 10 rebotes y Jonatan Basualdo acompañó con 17 unidades y 7 rebotes. En Peñarol, Juan Ignacio Marcos sumó 16 unidades, Tomás Perazzo anotó 14 puntos más 15 rebotes y Nicolás Franco terminó con 13 tantos más 10 rebotes.
Con la puntería de Juani Marcos, Peñarol abrió el juego con un 6-0. Atenas no se quedó atrás y, con los rompimientos de Franco Baralle como principal arma, emparejó el partido rápidamente (8-8 tras 5 minutos de acción). Con una defensa zonal, Atenas complicó a Peñarol y estiró su buen momento para escaparse 14-8, primero (con 2m50s restantes en el primer cuarto) y 20-13 al llegar al primer descanso.
Con mayor protagonismo de Nicolás Franco bajo las tablas y una defensa muy física, especialmente sobre Baralle, Peñarol dominó en el inicio del segundo cuarto y empató el juego en 23, con 4 minutos restantes en el parcial. A partir de ahí, con defensa cajón y uno, Atenas frenó la ofensiva milrayita y desequilibró con las acciones individuales de Tomás Gutiérrez, Baualdo y Jure, para sacar la máxima de 8 (34-26). Peñarol alternó entre cajón y uno y defensa individual, cortó el impulso ofensivo del griego y achicó la diferencia a solo 4 (37-33) al llegar al entretiempo.
Tras un intercambio de conversiones entre Santiago Muñóz y Tomás Perazzo, Atenas castigó con un gran parcial 12-2 para sacar la máxima de 14 (51-37) con 6m33s por jugar en el tercer cuarto. Si bien el local amagó con una reacción gracias a un parcial 5-0 (51-42), la realidad es que Peñarol no tuvo claridad, fue desprolijo y no pudo con la defensa cordobesa. Atenas vivió su mejor momento y logró una nueva máxima de 15 (57-42) al llegar al inicio del último cuarto.
Dos bombazos de Agustín Bugnar le devolvieron la ilusión a Peñarol. No obstante, con dos faltas seguidas, Juani Marcos llegó a 5 personales y debió dejar el juego. Atenas aprovechó el cimbronazo y con un triple de Basualdo volvió a escaparse a 14, con poco más de 7 minutos por jugar. Peñarol, golpeado en lo anímico, apostó al desequilibrio de Franco en la pintura y logró resultados. De todas maneras, ya no pudo remontar la diferencia, Atenas manejó la bola en los últimos instantes y se quedó con el título 78-64 para desatar el festejo de Bicampeón.
FUENTE: CABB