El chofer del micro urbano que participó del insólito accidente que el viernes por la mañana les costó la vida a dos personas en la intersección de la avenida Martín Fierro con la calle Morcillo, en Posadas, fue imputado por la Justicia a raíz del hecho.
Al colectivero de la línea 24 lo acusaron del delito de “doble homicidio culposo”. La imputación le hizo el juez de Instrucción Dos, César Yaya.
El hombre no está detenido, porque es una figura excarcelable, que se aplica a aquellos que matan sin intención de hacerlo. Su situación, además, se vio aliviada, porque no estaba alcoholizado al momento del hecho, ni con exceso de velocidad.
El accidente se cobró la vida del ingeniero de la Dirección Provincial de Vialidad Rubén Darío Esquenazi (57) y del motociclista Alan Gabriel Contrera (27). Sucedió a las 6.45 y tuvo características nunca vistas, dignas de una película de terror.
Un camión Volvo rompió un poste de madera que sostenía un cable coaxial que atravesaba la Martín Fierro (entre Lavalle y Francisco de Haro). Como el cable cayó unos metros, el chofer, de 26 años, bajó a intentar sostener el poste. Esquenazi vio la escena y bajó de su auto a ayudar. Habría sugerido cortar el conductor para evitar un accidente. Sin embargo, en eso apareció un el micro, que arrastró el cable y el poste.
El camionero y Esquenazi fueron lanzados por el aire. El ingeniero dio contra una camioneta estacionada y terminó muerto sobre la calzada.
Pero la desgracia no quedó allí. El coaxial que se llevó por delante el ómnibus dio en el pecho de Contrera, quien cayó a la avenida y lo arrolló el micro. También dejó de existir en el acto.
El chofer del camión se llama Daniel Ramírez. Sigue internado en el hospital Madariaga con un fuerte traumatismo torácico abdominal cerrado, excoriaciones en el mismo sector, una contusión en el pulmón y un derrame de pericardio.
Fuente: Misionesonline