La División de Vigilancia Epidemiológica de la Secretaría de Salud de Foz de Iguazú alertó a la ciudadanía para que tomen medidas preventivas contra la leishmaniasis. En el primer trimestre del año se confirmaron tres casos de leishmaniasis en humanos y un óbito. Los casos de leishmanias visceral comenzaron a surgir en el municipio en 2015 con el registro de dos casos confirmados. En 2016 estos números subieron para siete casos confirmados y tres con una tasa de letalidad del 43%.
En la actualidad, la mayoría de los casos son adultos y adultos. Los distritos sanitarios este y oeste de esta región del Brasil presentaron el mayor porcentaje de casos.
El segundo de la División de Epidemiología de Foz de Iguazú, Roberto Doldán, contó que esa localidad es el único municipio con registro de casos autóctonos. “La principal medida preventiva es el combate al mosquito, que se emplaza en los lugares donde la materia orgánica en la descomposición y los lugares más oscuros. Por eso, recomendamos mantener los terrenos limpios, sin basura, uso de repelentes en los personas y los animales, ya que también pueden ser contaminados “, dijo Doldan.
El funcionario explicó también que hay dos tipos de leishmaniasis, una leishmaniasis cutánea y una leishmaniasis visceral o calazar. La leishmaniasis cutánea se caracteriza por heridas en la piel que se localizan con mayor frecuencia en las partes descubiertas del cuerpo. Tardíamente, pueden surgir en las mucosas de la nariz, en la boca y en la garganta. Una leishmaniasis visceral, que es el caso confirmado en Foz, es una enfermedad sistémica, que compromete varios órganos internos. “Principalmente el hígado, la medula ósea, se caracteriza por la fiebre de larga duración, pérdida de peso, astenia, adinamia y anemia, entre otras manifestaciones. Cuando no es tratada puede ser letal en más del 90% de los casos “.
Transmisión de la enfermedad
La leishmaniasis se transmite al ser humano a través de la picadura del vector, en este caso el flebótomo hembra infectante, el cual previamente ha ingerido sangre de un reservorio infectado con los parásitos. Los flebótomos hembras requieren sangre para poder reproducirse.
Recomendaciones
La División de Vigilancia Epidemiológica recordó a la población que la primordial medida preventiva es erradicar el flebótomo de los hogares y evitar que los perros se infecten, y detectar los síntomas que en el perro pueden hacer sospechar leishmaniasis. Para eso:
– Erradiquemos hojas y malezas de los alrededores de las viviendas y la basura acumulada en nuestras casas.
– Mantengamos el terreno alrededor de la vivienda libre de malezas y corrales, y los animales domésticos y mascotas alejados de la vivienda durante la noche.
– Utilicemos repelentes para insectos, mosquiteros o telas metálicas.
– Usemos camisas de manga larga y pantalones o coloquémonos repelente en el caso de transitar por zonas selváticas o con mucha vegetación.
– Se deben limpiar los lugares donde habitan los perros y evitar que sean picados por los flebótomos mediante collares o pipetas repelentes que deben ser renovadas según las instrucciones.
– Debemos estar atentos si nuestra mascota presenta alguno de estos síntomas y si aparece llevarlo al veterinario:
– Caída del pelo especialmente alrededor de los ojos y las orejas.
– Fatiga.
– Pérdida de peso.
– Seborrea escamosa (como caspa).
– Crecimiento exagerado de las uñas.
– Ulceras en la piel.
– Hemorragia nasal.
– Se debe evitar el traslado de perros sanos e infectados desde y hacia zonas con leishmaniasis visceral.
Fuente: Foz.portaldacidade.com