El equipo liderado por el Dr. César Benmaor realizó una intervención de fístula broncobiliar a una beba de 20 días. Se trata de una patología muy rara, tanto que es el segundo caso detectado en el país. En el mundo solo se registran 35.
El sábado último profesionales del hospital de Pediatría y el de Neonatología llevaron a cabo una operación inédita en la provincia. Fue practicada a una beba que nació con una malformación congénitas.
Lo llamativo del caso es que la patología es muy rara, la intervención fue la segunda hecha en el país y en el mundo sólo hubo otros 35 casos. Se trata de la “fístula broncobiliar”, una afección que tiene una alta probabilidad de mortalidad si no es tratada a tiempo.
César Benmaor, el cirujano a cargo del equipo que llevó adelante el procedimiento contó a PRIMERA EDICIÓN los pormenores del caso. Señaló que de esa patología encuadrada en enfermedades raras, en Argentina hubo un solo caso que había sido tratado en el Hospital Garrahan.
“La afección es rarísima, hay 35 casos publicados en todo el mundo. La bibliografía indica que por su rareza, la mayoría de los cirujanos infantiles se muere sin haber visto un paciente con esta patología”, indicó el doctor.
Explicó que se trata de una malformación congénita en la que el bebé nace con una fístula (un canal que comunica de forma anormal dos órganos o tejidos), entre la vía aérea y la vía biliar (pulmón e hígado). Esta malformación provoca que la bilis, el líquido que segrega el hígado, vaya hacia los pulmones, con lo cual produce la muerte si no se trata a tiempo. Por ello es sumamente importante el diagnóstico precoz y el tratamiento.
“La paciente que tiene sólo 20 días de vida, comenzó con problemas respiratorios, ese fue el primer indicio clínico que tuvimos. Quedó internada y los neonatólogos al hacer el proceso de entubación para ponerla en asistencia respiratoria mecánica, observaron que salía bilis de los pulmones. Eso es algo sumamente infrecuente, ya que puede venir del esófago pero no desde el sistema respiratorio. A raíz de eso se hicieron estudios complementarios hasta llegar al diagnóstico de ‘fístula broncobiliar’”.
Detalló que la cirugía consistió en desconectar esa “comunicación” entre esos órganos.
“Se ingresó por el tórax y se detectó que la fístula estaba también en contacto con el esófago y hubo que despegarla de la traquea hasta el diafragma y también de la membrana que recubre el corazón. Fue una operación muy delicada que duró una hora y media. Si bien la niña evoluciona favorablemente, por su rareza, es difícil anticipar la evolución de este tipo de casos. Debido a las complicaciones derivadas, en la primera operación de estas características realizada en el Garrahan, se tuvo que proceder a una segunda intervención. La niña a la que intervenimos está estable, con buen estado general y no hubo complicaciones hasta el momento”, aclaró.
Benmaor destacó que la intervención fue realizada por médicos del Hospital Pediátrico, cirujanos de planta y residentes, anestesistas, enfermeros y neonatólogos. “Fue programada con antelación porque este tipo de intervenciones requieren de muchos detalles y preparativos. Se hizo un trabajo en conjunto con el servicio de neonatología del Materno Neo Natal, ya que se hizo de forma sincronizada con el Pediátrico”.
Sobre cuáles son las operaciones más frecuentes en niños que se realizan en el Pediátrico, Benmaor dijo que llevan a cabo cirugías tradicionales (abiertas) como así también laparoscópicas, urológicas y endoscópicas.
“En general las cirugía prevalente en niños son las hernias inguinales, criptorquidia (descenso incompleto de uno o dos testículos). Hoy en día, salvo que sea una intervención de muy alta complejidad como puede ser un trasplante, o una patología que requiera de un especialista, prácticamente todas las cirugías se resuelven aquí en Posadas”, destacó.
Fuente: Primera Edición