Ariel Atamañuk, es un gendarme que en cumplimiento de su deber hace más de dos años perdió sus piernas en un trágico accidente, donde además pudo salvar la vida de sus compañeros. Pero hoy su presente es muy distinto, el misionero y cordobés por adopción participará del Mundial de Piragüismo en Aguas Tranquilas que se realizará del 23 al 27 de agosto en República Checa.
El sueño de Ariel está a punto de realizarse. Nadie imaginaria que hace poco tiempo atrás, este representante de Gendarmería Nacional, peleaba entre la vida y la muerte, y hoy a dos años y medio de aquel triste acontecimiento donde perdió sus dos piernas, está a punto de cumplir el tan ansiado deseo de ser deportista y representar a Argentina.
Este miércoles 23 desde las 9:30 hs (4:30 horario de Argentina) el deportista que reside en Jesús María tendrá su primera carrera en aguas checas, en la clase Kl2, buscando meterse entre los mejores para acceder a la siguiente instancia de este mundial.
Desde hace algunas semanas Ariel entrena en República Checa junto a su profesor Oscar Quiroga y con todo el equipo Argentino intentando mejorar sus tiempos y adaptarse al clima y su bote nuevo que llegó procedente de Portugal.
El trágico accidente
Una mañana lluviosa del 14 de marzo del 2015, un camión se cruzó de carril dirigiéndose directamente al colectivo de Gendarmería Nacional conducido por Atamañuk. La habilidad Ariel, quien era el chofer, evitó una tragedia mayor. El saldo fue una víctima fatal, el cabo primero José Olmedo, y una veintena de heridos. El cabo Atamañuk fue uno de los que más comprometida vió su situación sufriendo la amputación de sus piernas.