La mujer, de 36 años, fue condenada junto a su pareja, de 40, autor de los abusos. La víctima tenía ocho años en el momento de los hechos. Su hermana, de siete, fue manoseada por la progenitora. Sucedió en Andresito y se conoció en octubre de 2015; abreviaron este martes ante el Tribunal Penal 1 de Eldorado.
Las dos niñas tuvieron el infortunio de nacer en una casa donde sus padres, lejos de cuidarlas, al contrario, las sometían. Y ayer, finalmente, ambos confesaron sus culpas: ella, que sujetaba de los brazos a su hija de ocho años; él, que aprovechó aquello durante casi un año, pese a las súplicas de la pequeña.
La pareja llegó ante el Tribunal Penal 1 de Eldorado acusada de “abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo” y “promoción a la corrupción de menores”. Y finalmente se retiró ayer con una condena de diez años de prisión, después de aceptar las responsabilidades que les corresponde por la pesadilla que les hicieron vivir a las dos pequeñas.
Ambos debían ocupar el banquillo de los acusados ante los jueces María Teresa Ramos, Atilio León y Lyda Gallardo. Sin embargo, ante los desgarradores testimonios de las víctimas, la defensa resolvió confesar y firmar un abreviado a diez años de prisión, en base a lo propuesto por el letrado Federico José Rodríguez, titular del Ministerio Público Fiscal ante el tribunal en cuestión.
Le contaron a la tía
En octubre de 2015 una de las hermanas de la imputada llegó a la casa de la pareja, en la zona rural de Comandante Andresito, ubicada en la frontera con Brasil y a 340 kilómetros de Posadas.
Durante la visita las nenas esperaron el momento y le contaron todo lo que soportaban en silencio.
El relato fue desolador y la tía no dudó. Ese mismo día formalizó una denuncia en la Comisaría de la Mujer. Efectivos de la Unidad Regional V no tardaron en arrestar a la pareja y ponerla a disposición del magistrado Martín Brites, titular del Juzgado de Instrucción 3 de Puerto Iguazú.
Conforme al expediente, los episodios fueron perpetrados entre octubre de 2014 y mayo de 2015, siempre en la casa familiar. En Cámara Gesell, la mayor de las niñas contó, entre otras cosas, que su propia madre la llevaba a la cama matrimonial y sujetaba mientras el concubino la violaba.
Los hechos, aunque no se logró precisión, se repitieron en más de cuatro oportunidades. La más pequeña, de 7, relató que su propia madre la manoseaba e incluso besaba sus partes íntimas.
Además de los abusos las nenas contaron que habrían sido obligadas, también por su madre, a fumar y tomar alcohol. Incluso, explicaron que la pareja mantenía relaciones sexuales frente a ellas.
De acuerdo a fuentes consultadas, la mujer tendría otros cinco hijos. Sin embargo, todos residirían en distintos lugares, con familiares que decidieron hacerse cargo.
La mujer cumplirá lo que le resta de prisión en la Alcaidía de Mujeres de Miguel Lanús, mientras que su pareja purgará sentencia en la Unidad Penal III del Servicio Penitenciario Provincial, en Eldorado.
Por un homicidio
En mayo de 2006, la misma mujer condenada ayer en Eldorado fue absuelta tras ir a juicio por un brutal homicidio, perpetrado dos años antes en la localidad de Andresito. En ese momento declaró públicamente: “A mis hijas las vi una sola vez desde el encierro. Lo único que quiero, después de un año y seis meses, es darle un gran abrazo”.
Actualmente se encuentra tras las rejas en la Alcaidía de Mujeres de Miguel Lanús, donde cumplirá lo que le resta de la condena. Su pareja, en tanto, permanece alojada en la Unidad?Penal III del?Servicio Penitenciario Provincial, en el sur de Eldorado.
Fuente: Primera Edición