En la búsqueda de mejorar los hábitos saludables en los niños y jóvenes, desde la dirección de Nutrición Escolar del Ministerio de Cultura, Educación, Ciencia y Tecnología, se recomienda a los padres la correcta alimentación de sus hijos donde no debe faltar el desayuno, la moderación en alimentos ricos en energía, grasas, azúcares y la práctica de deportes. Además, el equipo de nutricionistas recorre las Escuelas para verificar la preparación de los alimentos.
La alimentación saludable es el principal motor para mantener un buen estilo de vida que posibilite el desarrollo de las capacidades de los niños. Es por ello que es importante aprender desde la primera infancia los hábitos que les permita a los niños naturalizar las prácticas de comer sano.
Se considera que los primeros años es cuando el cerebro está en su máximo potencial de maduración y por ello se debe aprovechar al máximo estimulando el aprendizaje donde los niños desarrollan sus capacidades intelectuales.
Considerando que los niños son parte de la escuela desde temprana edad es fundamental enseñar desde que somos pequeños los tips para una vida saludable. Es por ello que desde la dirección de Nutrición Escolar de Ministerio de Cultura, Educación, Ciencia y Tecnología se promueve y propone que los chicos deben estar bien alimentados para un mejor funcionamiento de sus capacidades al momento del aprendizaje.
Lograr que los chicos tengan una alimentación saludable durante la infancia es todo un desafío para los padres al momento de comenzar la escolaridad. Muchos chicos saltean comidas importantes como el desayuno; aumentando el consumo a lo largo del día de alimentos ricos en grasas y azúcares como las galletitas o los jugos y gaseosas.
Es por eso, que la licenciada en Nutrición Noelia Eliana Yanez propone tips para establecer hábitos saludables:
- Desayunar todos los días, incluyendo una porción de lácteos que contribuyen a cubrir la cuota de calcio, un mineral muy importante para el desarrollo de sus huesos y dientes. Una porción de cereales, que son los que tienen menor proporción de grasa como: pan, vainillas y copos de cereal. Es necesario evitar las facturas y los panes o bizcochos de grasa. Algunas opciones de desayunos pueden ser leche con cacao + pan con miel o mermelada, sándwich de queso + jugo de naranja exprimido, licuado de fruta con leche + vainillas o yogurt + copos de cereal con trozos de frutas.
- Moderar el consumo de los alimentos ricos en energía, grasas y/o azúcares (golosinas, gaseosas, papas fritas, jugos artificiales, etc.). En la infancia suele ser elevado el consumo de este tipo de alimentos, que no aportan beneficios al organismo y contribuyen al aumento de peso.
- Incentivar a los chicos a practicar deportes como (fútbol, básquet, tenis; salir a pasear, poner música y bailar, sacar a pasear al perro, dar una vuelta en bici, saltar a la soga, etc.). Otro factor importante es limitar las horas sedentarias (mirar tele, jugar a la computadora, celular, etc.