Último día de testimoniales en el juicio por la Masacre de Panambí. Es una jornada clave, porque declararán, entre otros, los policías y peritos que trabajaron en la investigación del asalto que la costó la vida al maderero Oscar Carlos Knack, a su mujer Graciela Mojsiuk y a dos de los hijos de la pareja, Bianca y Cristian.
Raúl Rodriguez Quevedo fue el primero en comparecer. Es conocido de uno de los imputados, Juan Ramón Godoy. “Ese 25 de mayo de 2014, a las 14.30, el salió. Y lo volví a ver entre las 21 y las 22, lavando su auto”, recordó.
Apuntó que días previos Godoy estaba muy nervioso. “Él necesitaba dinero para poner un lavadero y me contó que le habían ofrecido cometer un asalto a un aserradero. Me dijo que en ese golpe el tenía que ser chofer”, añadió.
“Sobre ese golpe me contó que le habían propuesto recibir 50 mil pesos. Él siempre andaba en cosas raras, se decían cosas malas de Godoy. Se dedicaba a estafas como ‘Cuento el Tío’”, evocó.
Quevedo aseguró que el entonces abogado de Godoy le ofreció mentir para armar una coartada que beneficiara al acusado.
“Yo ne negué a mentir. Y al tiempo recibí llamadas intimidatorias”, afirmó.
“Querían que declarara que el día del hecho me había juntado con la familia de Godoy a comer chipas la tarde del hecho y eso no ocurrió”, remarcó.
Quevedo fue pareja de la sobrina del acusado y vivía en el mismo barrio que este.
Fuente: Misionesonline