El deceso de Ramón Esteban Galeano (45), comisario inspector de la Policía de Misiones, fue un mazazo que llenó de desconsuelo a sus familiares y amigos. Galeano jugaba para el equipo del Círculo de Periodistas de la categoría senior de la Liga Interprofesional de Fútbol Amateur (Lifa) de Oberá. Precisamente, el último sábado su equipo se midió con Médicos en la cancha del club River de Villa Bonita, localidad de Campo Ramón, donde se registró la tragedia. Según relataron testigos del hecho, apenas transcurrían los primeros minutos del segundo tiempo cuando Galeano se desplomó y quedó tendido en el césped. El motivo del deceso habría sido un infarto.
En tanto, El Territorio averiguó que Galeano y otros integrantes de la Lifa fueron inhabilitados por no presentar o tener inconvenientes con la ergometría, un estudio de esfuerzo con el que los cardiólogos determinan si una persona está en condiciones de realizar actividad deportiva de competencia. De todas formas, el último viernes la comisión directiva de la Lifa decidió habilitar a los “condicionados”, es decir, quienes presentaron estudios cuyos resultados requerían “nueva revisión y diagnóstico”. Galeano se encontraba en este grupo.
Fue habilitado
“La comisión informa que aquellos jugadores que se informaron como condicionados según el informe de la ergometría y que dichos estudios se remitieron a los profesionales que están trabajando en el tema, quedan HABILITADOS para jugar este sábado. Se estima que para el día lunes 4/6 estarán los nuevos informes de los cardiólogos y en base de dichos informes se tomarán las decisiones correspondientes en cada caso particular”, cita el comunicado que oportunamente dio a conocer la Lifa.
Ante el hecho consumado, la lectura del último párrafo genera escalofríos: “Se sugiere que aquellos jugadores que figuran como condicionados, en caso de que tengan estudios complementarios a la ergometría presentada, por favor informar y presentar los mismos para poder evaluarlos y realizar los nuevos informes”. El detalle de inhabilitados por el estudio de ergometría de la categoría senior superó el medio centenar, aunque para jugar el último sábado sólo fueron habilitados quienes estaban bajo el rótulo “Condicionados”.
Los otros inhabilitados fueron por no presentar el estudio, por tener el turno vencido o contar con el turno pero no con la fecha. Ahora, el interrogante que surge es si el deceso de Galeano se pudo haber evitado y quién y por qué motivo lo habilitó para jugar siendo que la ergometría presentaba algún tipo de reparo. El fallecido se desempeñaba como jefe del Área de Operaciones de la Unidad Regional II. Sus restos fueron inhumados ayer por la tarde.
Fuente: territoriodigital