El senador nacional se mostró reticente a algunos aspectos del proyecto por la falta de facultad que “tiene el Congreso de la Nación” para llevar a cabo un ley de este alcance, “sabiendo que todos los hospitales de Misiones solventados por los misioneros”. No obstante, adelantó que acompañará en particular los artículos que “tengan que ver con la despenalización”.
Tras la media sanción que logró el proyecto de ley para despenalizar el aborto en Diputados, ahora resta conocer cuál será su destino en el Senado, donde se espera que la votación también esté muy reñida.
Respecto al texto, el senador y ex gobernador misionero Maurice Closs señaló que “la ley que salió es una ley con una técnica legislativa muy mala, muy descriptiva y confusa”. En ese sentido, precisó que las irregularidades se centran en “lo que son los presupuestos nacionales y provinciales: no veo cómo van a poner en funcionamiento un esquema de aborto gratuito en las provincias, cuando Nación no tiene hospitales allí”.
Asimismo, sostuvo que “es una ley que ha provocado una bisagra y fuerte debate, pero obedece a la técnica legislativa de los últimos tiempos en Diputados, donde en comisiones, para lograr los consensos, se van agregando y quitando artículos”.
“Me parece que es una ley que, en líneas generales, tiene muchísimos defectos, aún cuando en términos de lo que es la expresión de un cambio, hay que tenerlo en cuenta”.
Eso no significa, según la óptica del legislador nacional, que no haya que atender “la expresión de un cambio” evidente en la sociedad: “Creo que hay que tratar de salvar de esa ley todo lo que tiene que ver con la despenalización”, ya que “mantenemos una figura penal que hoy de hecho ocurre y por la que nadie tiene sanción, por lo que mantener esta penalización es algo absolutamente discutible”.
Además, valoró “la idea de sacar este tema de la clandestinidad. Me parece que toda vez que deja de ser un delito, naturalmente irá saliendo esto de la clandestinidad y quedará reservado para la apreciación moral o la reflexión personal que cada uno tenga”.
Entre las críticas, Closs señaló que “no le gusta” que los médicos deban registrarse para manifestar su objeción de conciencia: “Me parece pasar de un extremo a otro. También me pregunto quién va a solventar todos estos gastos, cómo se va a hacer, y qué facultad tiene el Congreso de la Nación” para aprobar una normativa de este calibre, “sabiendo que todos los hospitales de Misiones son solventados por los misioneros”.
Ese último se ve agravado por la coyuntura actual, “en un país que ve disminuir su presupuesto de salud día a día”, y contrastó esa imposición que se pretende desde el Congreso con la situación que vive la provincia: “Del plan remedial está viniendo un 40% de los remedios que venían antes. Los médicos de cabecera han disminuido arriba de 150, cerca de 200. Los programas de salud mental bajaron de cerca de cincuenta médicos a poco más de treinta. En dos años de gestión vino un millón y medio de pesos para lucha contra el dengue, cuando cada año se gastan veinte”.
Respecto a qué hará finalmente cuando se lleve a cabo la votación en el Senado, Closs comentó que todo depende de “la cantidad de artículos que son y qué es lo coherente”, aunque adelantó que acompañará “en particular los artículos que tengan que ver con la despenalización. El resto seguramente votaré en contra”.
No obstante, mostró su predisposición para aportar “todo lo que pueda hacer para que la ley sea superadora y deje a todos medianamente conformes. No creo que sea una ley que tiene nada para festejar, pero si se puede intentar mejorar algo, hay que hacerlo”.
De todos modos, consideró “algo prematuro” dar un pronóstico de lo que pueda suceder en el recinto. “En las últimas horas la política se metió muy fuerte. Los gritos de Carrió van en esa línea. Si uno mira algunos votos que cambiaron, me parece que es como que el Gobierno dijo ‘vamos a sacar este tema y tirárselo al Senado, donde las mayorías peronistas van a tener que resolver’”.