Nelly Bondarenco (62) trabajó toda su vida y hace un año se jubiló. Empezó a disfrutar de los beneficios del retiro, hasta que en agosto de este año unos inescrupulosos la estafaron en más de 40.000 pesos con la excusa de que tenía 86.600 pesos para cobrar de la Ley de Reparación Histórica.
Para acceder al beneficio, la mujer debía ir hasta el cajero y seguir una serie de pasos que el supuesto operador de Anses le iba dictando vía celular, a fin de que realizara el depósito.
A la abuela apostoleña la llamaron al teléfono fijo de su domicilio el 14 agosto al mediodía y le mencionaron todos sus datos. Luego, le pidieron que vaya con un familiar hasta el cajero y que lleve un celular para recibir los datos de la transacción online. Tenía tiempo hasta las 15.30.
Los embaucadores le hicieron sacar un préstamo de 15.000 pesos con la excusa de que esa plata serviría supuestamente para recibir el beneficio.
Los estafadores, no conforme con eso, le pidieron que introduzca otra tarjeta del mismo banco, “porque la cuenta no daba” y le sacaron 4.000 pesos de la tarjeta de un familiar. Pero como “la caja de ahorro no daba el margen para recibir el pago”, le preguntaron si tenía otra persona afín con mayor margen, para así pedirle que le preste su cuenta para la supuesta transferencia.
Así, los estafadores le sacaron otros 24.000 pesos, por lo que se alzaron con 43.000 de la moneda nacional, que fueron transferidos a una cuenta en Misiones y otra en Córdoba.
Luego de seguir todos los pasos, nada ocurrió y los 86.600 pesos nunca aparecieron.
Una vez que un amigo de la familia se dio cuenta que los estaban estafando no dudaron y realizaron la denuncia en el juzgado de Apóstoles, el 15 de agosto. También fueron hasta el banco para solicitar que el préstamo sea cancelado pero desde la entidad le afirmaron que nada podían hacer porque fue sacado de forma voluntaria.
“Yo cobro una jubilación de 6.000 pesos y la verdad es que no sé cómo voy a devolver la plata que me sacaron, porque me estafaron. Apenas me alcanza para pagar los remedios de mi marido y nadie me da una respuesta”, explicó Nelly indignada a El Territorio.
“Siempre trabajé con bancos pero esta gente sabía todos mis datos, cuánto ganaba, dónde cobraba, y te hablan de una forma que me embaucaron. Yo no entiendo cómo la Justicia no puede hacer nada si están los nombres de las cuentas a donde fue transferida la plata, las cámaras del cajero, el número de donde me llamaron, todo, y yo ahora tengo que pagar un préstamo de 15.000 pesos, que ni sé cómo voy a devolver”, afirmó.
“Hice la denuncia, fui a hablar con el gerente y no me dan soluciones. Hoy cuento lo que me pasó porque no quiero que le pase a ningún abuelo más. Yo casi me morí no sé cómo voy a devolver esa plata”, indicó.
Más casos
El caso de Nelly ocurrió el 14 de agosto, pero trascendió ayer. En las últimas semanas, más llamados de supuestos operadores de Anses se multiplicaron entre los jubilados misioneros y todos bajo la misma modalidad: anunciando que el jubilado tiene una sentencia firme para cobrar por la Ley de Reparación Histórica y que debe ir al cajero en forma urgente.
La abogada Gabriela Natalia Grima, quien es especialista en seguridad social, recibió varias consultas de abuelos que recibieron llamados de supuestos operadores de Anses.
“Lo más llamativo es que tienen todos los datos tanto del jubilado, como de su familia y a todos le piden que se dirijan hasta el cajero. Los llaman al mediodía y le dicen que tienen tiempo hasta las 15.30. Todos son clientes del banco Macro, que les da el préstamo preaprobado en el cajero. Con la excusa que tienen poco tiempo y que tienen que ir al cajero, los estafan”, explicó Grima.
“Hice consultas en la Anses y ellos también están recibiendo reclamos de abuelos que los llamaron bajo esta modalidad. Inclusive hay casos de jubilados del IPS que recibieron llamados y a ellos ni siquiera les alcanza la Ley de Reparación Histórica”, agregó la letrada.
Grima solicitó: “Hay que recordarle a los abuelos que la Anses no hace trámites por teléfono y que en caso de haber una sentencia o una reparación histórica se hace una notificación por escrito y sin montos. Es un trámite que lleva su tiempo y que no se soluciona en el cajero”.
86.000
Inflación .
Esa es la cantidad de dinero que le prometen a los jubilados para que realicen la transferencia bancaria como parte de la reparación histórica anunciada por el gobierno nacional.