Un contador público se entregó ante la Justicia tras ser sindicado como el autor de un disparo que terminó con la vida de un perro, indicó una fuente.
El hombre estuvo varias horas en carácter de prófugo ya que se ordenó su captura, no obstante no quedó detenido y se le notificó del inicio de una causa en su contra por “abuso y portación de arma de fuego y maltrato animal”, según la policía. Si bien permanecerá en libertad, quedó supeditado a ulterior resolución.
De acuerdo a testigos que fueron entrevistados por los efectivos de la comisaría Tercera -que intervino por jurisdicción y acudieron al llamado de algunos vecinos-, momentos antes vieron a un hombre al mando de una camioneta Volkswagen Amarok blanca, al que señalaron como el sospechoso de herir mortalmente de un tiro a un perro en situación de calle.
Al menos cuatro testimonios habrían permitido dar con el domicilio del involucrado, domiciliado a escasas cuadras del lugar del hecho.
Cuando los policías fueron a buscarlo no se hallaba en su casa y tampoco encontraron su vehículo, cuya matrícula difundieron algunos testigos y al parecer coincidía con la de su propiedad. Por tal motivo los efectivos solicitaron al Juzgado de Instrucción 3 -en turno-, a cargo del magistrado Fernando Verón, una solicitud para realizar allanamiento en la morada mencionada a los fines de proceder al secuestro del rodado y el arma de fuego utilizada, sin embargo antes de dicho procedimiento el individuo se entregó ante la Justicia y el operativo no se concretó.
En cuanto al arma de fuego y por las dos vainas servidas que incautó la Policía Científica en el lugar donde fue atacado el perro, se supo que se trata de un revólver calibre 22.
Fuentes del caso indicaron que el perro, tras ser herido fue trasladado a una veterinaria donde lo asistieron, pero lamentablemente se produjo su muerte alrededor de las 18.45 del pasado martes, tal como adelantó ayer este Diario.
El parte del médico veterinario dio cuenta que el animal presentaba tras realización de rayos X de su columna cervical “un proyectil y fragmentos de plomo diseminados sobre y dorsal de la columna en el perfil y hacia la izquierda de la línea media en el frente. También se observa una fractura incompleta sobre el margen craneal de la escápula izquierda. No se observa lesión por proyectil en vértebras del sector cervical. Sobre el lado derecho se observaron signos compatibles con la presencia de aire o gas. En sector cervical se observan signos de inestabilidad o espondilolistesis muy marcados”.
Vale destacar que un grupo de vecinos reunió el dinero suficiente para las atenciones veterinarias del perro, que demandaron casi tres mil pesos, indicaron. También es materia de investigación si el sospechoso habría intentado dispararle a otros animales antes de herir al mencionado can.