El último jueves, alrededor de las 22.45, la joven fue asaltada por segunda vez en el mismo lugar, situado a metros de la Escuela 288.
Todavía dolorida por los golpes que sufrió al ser arrastrada por los malvivientes que le robaron la cartera, recordó que al ingresar a calle Roca desde la plaza Malvinas escuchó pasos, miró hacia atrás y vio a dos sujetos que la seguían.
“Cómo ya me había pasado algo parecido empecé a caminar más rápido y ellos se dieron cuenta, y en unos segundos estaban a unos metros de mí. Vi un kiosco con el cartelito prendido, me fui acercando cada vez más rápido y cuando volví a mirar para atrás uno venía corriendo. Ahí tiré el celular por la ventanilla del kiosco”, agregó.
“Pasaron corriendo por frente a la casa de una amiga mía y su novio lo reconoció a uno de los ladrones. Después me dijeron su nombre, me mostraron una foto del Facebook y lo reconocí. Fue el que me amenazó con que si no soltaba la cartera me iba a pegar un tiro, y por eso la solté”, explicó.
Monzón indicó que se trata de una zona bastante oscura y, para colmo, al momento del hecho no había ningún vecino afuera como para pedir auxilio.
También ponderó que “gracias a Dios estoy bien, sólo tengo los raspones en la espalda. De ahora en más habrá que cuidarse y tomar recaudos”.
Por otra parte, en investigación del hecho, desde la Unidad Regional II informaron que el viernes fueron detenidos Mario D. (18) y Mauro P. (28), éste último quien habría amenazado a la víctima. En un arroyo de la zona hallaron la cartera de la damnificada.
FUENTE EL TERRITORIO