Confesó ser autor de abuso sexual con acceso carnal agravado por la situación de convivencia, pero le pareció «mucho» la pena de diez años de cárcel.
Un hombre de 41 años que durante varios años fue empleado del Club San Martín de San Juan , admitió el viernes último que violó a su hijastra de 17 años cuando la niña estaba postrada en una cama casi sin poder moverse a causa de la severa enfermedad neuromuscular crónica que padece.
Pese a confesar su autoría en el delito de abuso carnal con acceso carnal agravado por la situación de convivencia, se quejó porque a su entender «es mucho» los diez años de cárcel que a través de su abogado Narciso Godoy, acordó recibir en un juicio abreviado firmado con la fiscal Marcela Torres.
La violación la perpetró alrededor de las 19. A esa hora la madre de la adolescente y otra de sus hijas salieron hacia una peluquería. La niña permanecía recostada porque había sido afectada por una de las crisis de esa grave enfermedad que le impide moverse afectando sus músculos.
«Si decís algo te mato«, amenazó el autor de la violación. La víctima rompió su silencio meses después y le contó a su madre el aberrante suceso. El sujeto negó haberla sometido y dijo que a esa hora trabajaba. Las pruebas sin embargo lo complicaron, pues se demostró que no trabajó a la hora en que ocurrió la violación. Los informes psicológicos sobre la niña ratificaron que no mentía.
El juicio está a cargo del magistrado Raúl José Iglesias de la Sala I de la Cámara Penal de San Juan.
FUENTE MISIONES ONLINE