En medio del descenso de temperatura por las lluvias que llegaron a la provincia, unos niños descalzos y sin abrigos dieron inicio a un pedido solidario de asistencia que sumó una cantidad enorme de donaciones para una familia con ocho niños.
Luego de viralizarse las imágenes en las redes sociales de los niños descalzos y sin abrigos, las respuestas no tardaron en llegar. La asistencia continúa para otras familias de los barrios posadeños.
A pesar de tratarse del caso de una familia en particular del barrio Santa Rita, es una situación que se repite en las zonas más humildes de toda la provincia.
En diálogo con el difusor de las imágenes en redes sociales del pedido solidario para estos niños, Miguel Ríos, contó que “hace unos seis años que estoy con las actividades solidarias en los barrios y en realidad primero fui a llevar donaciones a una familia con cinco niños, cuando me invitan a conocer la situación de sus vecinos, frente a la iglesia Santa Rita. Cuando llegué a ese lugar me encontré con una situación que te generaba una angustia al ver la casa con el piso de tierra, los niños descalzos y todos mojados por la lluvia, mientras hacía unos 11 grados de temperatura en Posadas. Son ocho chicos, con edades que van desde un mes de vida hasta los 12 años, la madre se ocupa de ellos en el hogar y el padre de la familia realiza changas pero con todo esto de la pandemia se les complica aún más conseguir trabajos y viven de juntar cartones, ir a retirar basura con un carro”.
Luego de conocer de cerca el contexto familiar, explicó que “busqué la forma de ayudarlos con algo y justo tenía algunas donaciones de ropa de adulto y mercaderías, así que les acerqué las bolsas donadas por una distribuidora de Posadas. Con el permiso de la madre, compartí las imágenes en redes sociales para pedir donaciones, pero jamás me imaginé semejante trascendencia. Me llamaron de todas partes, hasta de otros países, para ofrecer ayuda. Para tener transparencia siempre pido que acerquen cosas pero dinero no, para evitar cualquier problema”.
Miguel Ríos detalló además que “hasta altas horas de la noche del sábado recibí llamados para colaborar con esta familia. En pocas horas luego de publicar las imágenes llegué a su casa con todas las cosas que llevaron personas desde Candelaria y otros puntos. La respuesta fue muy rápida y la solidaridad de la gente estuvo más presente que nunca”.
Respecto a las necesidades en los barrios más humildes, precisó que “hace años estoy en contacto con los merenderos barriales para colaborar y conseguir donaciones para la gente; con mi moto de 110cc me paso recorriendo la ciudad llevando las cosas que la gente viene donando. En esto, la pobreza está en los barrios de Posadas, pero una situación tan difícil en plena ciudad y frente a una iglesia tan reconocida no se ve siempre. Sin embargo, en los asentamientos están rodeados de las necesidades en todo el contexto barrial y siempre se encuentran casos como el de la familia de Santa Rita”.
En cuanto a la incidencia de la cuarentena en los sectores populares de Posadas, Ríos remarcó que “muchas personas suelen trabajar de manera informal, en las changas y con esta situación de pandemia es cada vez más complicado para las familias el mantenerse. Me contactaron varios casos que pasan muy mal en estos tiempos y a diario llega un nuevo pedido de asistencia en los barrios”.
Sobre la llegada de las donaciones y la distribución entre quienes más lo necesitan a lo largo de la ciudad capitalina, indicó que “hasta este lunes estoy enfocado en este caso de Santa Rita, pero luego existen otras familias que también necesitan ayuda. Recibimos todo tipo de elementos, menos donaciones en efectivo. Para quienes me acercan elementos, al número de contacto siempre les reenvío las imágenes de la entrega de todo lo recolectado a las familias”.
FUENTE PRIMERA EDICIÓN