En pleno invierno el arándano es una primavera en flor, generando buena expectativa para la cosecha 2020. Se trata de un cultivo poco conocido en Misiones pero que cada año va ganando relevancia e interés entre los trabajadores de la tierra.
Tal es así que hace once años, en colonia San Jorge, San Pedro, algunas familias asumieron el desafío de diversificar las chacras con un exótico cultivo: el arándano, siendo las condiciones climáticas la lucha de todos los años.
Es que para los meses de frío la planta se cubre de flores poniendo en alerta a los productores por la sensibilidad de los frutos ante las heladas, sobre todo las más fuertes que llegan durante agosto. De acuerdo a la floración, la expectativa para esta zafra es muy buena.
Se sabe que una de las mayores productoras de arándano en Argentina es la provincia de Entre Ríos; sin embargo en la tierra colorada la planta se adaptó al clima y al suelo, generando entusiasmo en las familias que llevan adelante la actividad, que resulta muy rentable siempre y cuando las condiciones del clima sean favorables.
Si bien la planta resiste a las bajas temperaturas, las frutas son castigadas por las heladas, poniendo en riesgo toda la zafra, sobre todo porque la cosecha comienza a mitad del mes de agosto, período en el cual el invierno suele presentar días con temperaturas que provocan intensas heladas.
Una de las familias que dio continuidad al cultivo pese a las pérdidas reside en colonia San Jorge, a unos ocho kilómetros de la zona urbana; en su chacra es posible observar unas cuatro mil plantas de la nutritiva fruta, que en esta época del año no cuenta con hojas encantando con una abundante floración que puede resultar en unos tres mil kilos de frutas.
“Este año hasta es impresionante la cantidad de flores, venimos muy bien. Las heladas anteriores no hicieron daños y estamos muy entusiasmados”, indicó a El Territorio Ricardo Werner, productor del fruto de la zona.
“Este año queremos aplicar alguna técnica para evitar que los días de frío afecten a las frutas en su primera etapa de desarrollo. Es un cultivo que requiere cuidados e inversión, necesitamos asistencia para poder salvar al menos el 40% de las frutas”, agregó Werner.
En todos los años que la familia dedicó tiempo y esfuerzo para lograr una buena zafra y con la renta invertir en el cuidado del suelo y un sistema que proteja a las plantas tanto de las heladas como del granizo, no obtuvieron los resultados esperados justamente por no disponer de recursos económicos extra para prevenirse de las condiciones climáticas desfavorables.
Una de las opciones que utilizan es la quema de aserrín durante las noches de bajas temperaturas, hasta el momento lograron que la Municipalidad de San Pedro aporte cuatro cargas de aserrín, siendo necesarias unas 20 cargas más.
En cuanto a la comercialización, el productor logró abrir puertas en el mercado provincial que le garantizan la venta de las frutas, por lo que mientras aprecian la belleza de las plantas en flor apelan al acompañamiento de los organismos relacionados al agro para poner en valor este tipo de cultivo único en la provincia de Misiones.
Preciado
Con un toque ácido y dulzón, los arándanos son cada vez más preciados en la gastronomía y pastelería. Pertenecen a la familia de los frutos del bosque y son una de las frutas más saludables del planeta. Lo son porque tienen un alto contenido en antioxidantes los cuales, entre otros beneficios, combaten el envejecimiento prematuro neutralizando los radicales libres, combaten inflamaciones, son buenos para el corazón, la vista, la memoria y en dietas de pérdida de peso.