Es la novena vez que se presenta un proyecto de ley de interrupción voluntaria del embarazo en el Congreso argentino, pero quizá es la última. A diferencia de las anteriores, la iniciativa es impulsada por el Gobierno y cuenta con el respaldo del presidente, Alberto Fernández.
Los partidarios del aborto legal negociaron cambios de última hora para sumar adhesiones, conscientes de la reñida votación que se avecina: a partir de este jueves en la Cámara de Diputados y después en el Senado. En 2018, el proyecto fue aprobado por la primera Cámara, pero rechazado en la segunda.