Estaba atado al sol, deshidratado, desnutrido, tiene leishmaniasis y moquillo. También tiene signos de haber sido golpeado.
La protectora de animales de Oberá, Patitas Felices, rescató un perro en total estado de abandono. El animal está internado y lucha por su vida.
“Nos enteramos por la publicación de una señora que pedía que alguna protectora hiciera algo porque el perro se estaba muriendo atado. Ahí pedimos la dirección y fuimos a verlo. Pero antes pasamos por la comisaría cuarta de Barrio Norte, porque el perrito estaba cerca, en Villa Kleiven”, relataron las rescatistas.
Pasaron por la comisaría y desde allí “nos acompañó un policía. Llegamos y el dueño no estaba, pero apareció la mamá diciendo que es dueña del terreno y también el hermano. Ellos negaron saber sobre el perro, y que estaba en ese estado, algo muy extraño, ya que es el terreno de la señora“.
“Lo cierto es que después del conflicto de cómo íbamos a ingresar a un lugar privado, nos autorizó a llevar al animal. Fue internado de emergencia y hasta el momento sigue igual. No responde a nada, está con suero, calmantes, analgésicos, vitaminas las 24 horas”, indicaron.
Según el diagnóstico del médico veterinario que lo atiende, por el grado de desnutrición, las condiciones de abandono serían de larga data. “Habría estado semanas sin comer, tenía tierra adentro como que por último estuvo comiendo tierra y totalmente deshidratado. Perdió su capacidad motriz, no camina y no va a volver a caminar. También tiene heridas, golpes, quemaduras cicatrizadas, que serían viejas. Hemorragia interna. No responde a nada, estamos haciendo todo para que se recupere, pero está muy delicado“.
“Lo que sí está contenido, mimado. El veterinario le empezó a dar comida con jeringa para que pueda recuperar fuerza y le estimula para que haga sus necesidades, pero gime de dolor y es doloroso verlo. Tiene leishmaniasis y moquillo, si le llega al sistema nervioso, tendremos que sacrificarlo”, lamentaron.
Maltrato animal
El rescate se realizó el domingo 5 y también la protectora radicó la denuncia correspondiente. Poseen todos los datos de quien sería el dueño, lo que ya está en manos de la Justicia.
“Desde el domingo estamos mal, muy afectados. Nos amenazaron por atropello de domicilio. No se acercó nadie y nos hacemos cargo del tratamiento y todos los gastos. Tendría sólo días, pero pensamos en positivo, pidiendo a Dios que salga adelante. A veces debemos aceptar que llegamos tarde, pero si se va, se irá contenido y si se salva quedará con secuelas, pero lo seguiremos cuidando”, explicaron.
El animal tendría alrededor de ocho años, estimaron. “Hicimos la denuncia y vamos a ir a fiscalía, seguir todas las vías legales. No es la primera vez que pasa y no podemos dejar que siga ocurriendo. La indiferencia es terrible, estaba agonizando y nadie lo ayudó“.
“Ese día que lo rescatamos estuvo, como seguramente hacía muchos días, tirado al sol. Ante la ley somos los delincuentes que entramos a un domicilio privado, pero estamos con asesoría legal, además las fotos y videos hablan por sí solos”, dijeron.
Atención
Ayer miércoles, pudo comer por sus medios. El veterinario le acercó el comedero y el animal reaccionó acostado en el colchoncito en el que yace. “Esperamos que la Justicia actúe y que la gente se entere que estas cosas pasan, por suerte estuvimos cerca en este caso, pero no sabemos si se va a salvar. Ya sufrió demasiado”, señalaron desde la protectora.
Sin respaldo policial
“Una vez una señora nos dijo por una de nuestras publicaciones de otro rescate, que hacemos esto para enriquecer nuestra humanidad, ya que reaccionamos como cualquier persona reaccionaría al ver a un perro en mal estado“, contaron.
“Es triste ver que los buenos somos los malos y no los dueños que abandonan a sus mascotas. Además ese día, entre la desesperación de conseguir un veterinario que nos atienda de emergencia, la mamá del dueño de este animal que apareció y criticó lo que hacíamos. La situación nos puso muy mal“.
“Cuestionamos mucho el accionar policial de ese día, de los oficiales que nos acompañaron, porque no nos ayudaron en nada. Se sabe que ellos no pueden entrar sin una orden al domicilio, pero nunca se ofrecieron a ayudarnos a subir al perro al auto, que es grande y en el momento era un peso muerto. Nos trataron de alteradas, de locas, y ellos mismos nos dijeron que si queremos accionar legalmente empezamos mal nosotras por entrar al domicilio“.
“Nos preguntamos, si estuvimos mal en salvar a un perro que agoniza. Creemos que más allá de cualquier cargo o profesión, somos humanos y ese día no vimos ningún tipo de lástima por el estado del animal”, subrayaron.
primera edición