Luego del embargo de las cuentas bancarias hoy la justicia decidió designar un interventor recaudador, en las sede de la CELO y en los tres puntos de cobro de los servicios y venta de energía prepaga. Con esta medida pone a la cooperativa en una situación más que difícil porque no podrá hacer frente con sus compromisos como ser sueldos. Algunos intuyen que es camino a una posible intervención cuestión que es difícil pero no imposible de que ocurra.
Si bien todas las cooperativas eléctricas están pasando por idéntica situación económica, según lo manifiesta la dirigencia del sector, incluso la cooperativa de Eldorado le debe mil millones de pesos y no le cortan la luz, solamente le advirtieron en las últimas horas que darían intervención a la justicia, por la obviedad que EMSA, tiene tratos diferentes con las demás cooperativas. Evidentemente con la CELO podría estar existiendo un desentendimiento que no se logra entender o explicar claramente, porque no hace mucho tiempo los socios padecieron de un corte de energía a fines del año pasado por falta de pago a EMSA, y ahora por intermedio de la justicia le embargaron las cuentas bancarias por más de 180 millones de pesos. Algunos interpretan que es una cuestión política y otros lo niegan, argumentando que los directivos de la CELO no se ajustan a las formas de pago de la deuda más los intereses por mora que los directivos de la CELO quieren discutir por la elevada tasa de intereses.
La medida cautelar, más dañina es haber embargado la recaudación diaria que tiene la cooperativa en su cede y en las tres bocas de cobro y venta de energía y dejarle sin ningún tipo de ingresos y eso sería un problema más grave. Algunos entienden que EMSA más allá de querer cobrar quería poner en evidencia a la conducción de la CELO opto embargar las cuentas bancarias, en la que en ese momento tenía unos diez millones de pesos. Algunos se preguntan por qué la empresa eléctrica no toma idénticas medidas con otras cooperativas que tienen un nivel de endeudamiento igual o superior.
La situación financiera de la CELO se ve también reflejado en el bolsillo de los socios que llegan a un cuarenta por ciento de morosidad, y mes a mes sigue aumentando en pequeños porcentajes la luz, además el aumento en el servicio de agua potable, que seguirán afectando el bolsillo de los trabajadores. Y se viene la quita de los subsidios nacionales, el aumento será del 6,58 de mayo a junio y para los grandes usuarios será de entre el 39,8 y 41,26 por ciento. Que son aumentos realmente significativos y que seguramente tendrán algún tipo de reacción.
La CELO es concesionaria del servicio eléctrico, y algunos plantean la posibilidad que pase a manos de EMSA la prestación del servicio eléctrico, lo cierto es que esto se presenta como algo poco probable pero no imposible. La empresa eléctrica provincial tiene sus problemas económicos y financieros y difícilmente quieran hacerse cargo de un problema más y de un área de concesión que es deficitaria y menos hacerse cargo de una deuda millonaria que se soluciona con aporte financiero. Hoy por hoy el problema es de los directivos de la CELO y no de EMSA, y muy difícilmente se decida políticamente o administrativamente cargarse con un problema más. Sin embargo hay algunos tienen la teoría de que se está preparando el terreno para que sean los socios los que soliciten como solución, la intervención desde el Ministerio de Cooperativas y mutuales de la provincia.