Elías F. posee dos causas previas por intento de homicidio. Durante la instrucción un testigo lo nombró pero no fue investigado. Ahora se desconoce su paradero.
Un tatuaje en el cuello y el acento “porteño” enfocaron la pesquisa por el homicidio de la comerciante y catequista Gladis Beatriz Gómez (39) hacia la pista de un tercer sospechoso cuyo nombre ya figura en el expediente, aunque en primera instancia no fue citado y luego no fue hallado.
Se trata de un hombre identificado como Elías F., quien tendría entre 27 y 30 años, según precisó un vocero de la investigación, y posee dos antecedentes por homicidio. La figura del citado cobró relevancia luego que los dos principales sospechosos que tuvo la causa -Mario Antonio A. (28) y Santiago Miguel S. (27)- fueron beneficiados con la falta de mérito y recuperaron la libertad, el pasado 23 de marzo.
De esta forma, la investigación por el crimen de Gómez volvió a foja cero, lo que generó gran indignación en los familiares de la víctima y la comunidad en general. En tanto, ahora la pesquisa está enfocada en dar con Elías F., quien en el expediente fue nombrado por al menos tres personas: los dos sospechosos que fueron excarcelados y el testigo Lucas Adrián R.
Descripciones de la misma personas
Las defensas de los primeros sospechosos que tuvo el caso cuestionaron la prueba testimonial y a la discrepancia respecto de los dichos de la víctima ante el personal policial y lo que dijo la testigo R. Q. sobre qué escuchó de boca de ésta.
Por un lado, en el acta de constatación e inspección ocular del 2 de marzo a las 21.18, se dejó constancia que en el lugar del hecho se encontraba la víctima “(…) donde al preguntarle sobre características o descripción de los mismos o de la motocicleta, por el estado en que se encontraba manifestó desconocer”, suscribió el oficial ayudante Leandro Fraga.
Luego se cita el informe del día 9 de marzo, firmado el oficial subayudante Luis De Mora, que dice: “Al pedir que nos comente cómo habría ocurrido el hecho, ella nos dijo que ingresó una persona a comprar algo y en un momento dado esta persona saca un arma de fuego, le apunta y le da un tiro, dándose luego a la fuga tras subirse a una motocicleta con destino ignorado”.
“Con respecto a las características del agresor solamente supo decir que era un delgado, alto y tez trigueña”, agregó. En tanto, también se recepcionó declaración testimonial de una vecina de la víctima, R. Q., quien contradijo lo manifestado por la Policía en los informes previos.
La testigo mencionó que la Gómez no aportó características del conductor de la moto, pero sí del acompañante, a quien definió como “grandote, morocho y que la tonada no era de acá”.
Fuente, El territrio.