Se cumplen 10 días de búsqueda de Pedro Faustino Do Reis (51), quien el pasado 11 de noviembre se fugó de la Unidad Penal II de Oberá, momentos en que realizaba labores en la chacra del predio.
En primera instancia se tendió un operativo por los barrios cercanos a la cárcel, pero con el correr días se amplió el radio de búsqueda a la frontera con Brasil, aunque por el momento no hay rastros del evadido.
Se estima que lo dejaron solo durante varios minutos y, al detectar que no estaba, los uniformados a cargo del preso lo buscaron por su cuenta en el amplio predio del penal y en las chacras vecinas, pero al no hallarlo dieron parte al director Héctor Germán Ayala.
Inmediatamente se informó de la novedad a la cúpula del Servicio Penitenciario Provincial (SPP) y se radicó la denuncia ante la Seccional Quinta de Oberá, con jurisdicción en la zona.
En tanto, un vocero del SPP indicó que “surgió el dato que estuvo en San Miguel, en una casa de calle 4, de donde se fue al oscurecer”.
Precisamente, el barrio San Miguel se ubica a tres kilómetros de la cárcel, cruzando por las chacras.
Posible cómplice
Tal como se informó, otra hipótesis que se baraja, es que Do Reis contó con apoyo externo.
En este punto entra la figura de Felipe Fernando Dos Santos (26), condenado por robo calificado que el pasado 2 de noviembre dispuso de una salida transitoria por 24 horas y nunca regresó.
Tanto Do Reis como Dos Santos tiene como último domicilio El Soberbio y, según una fuente interna, compartían mucho tiempo en la cárcel de Oberá.
“No se descarta ninguna hipótesis, pero se daban, todo el tiempo hablaban y puede ser que hayan planificado todo. Además, los dos son de la zona costera y conocen a la perfección cómo cruzar al Brasil”, indicó.
En ese sentido, también investigan si otros detenidos escucharon o sabían de algún tipo de plan de escapatoria. Lo cierto es que más allá de cualquier especulación, ninguno de los dos fue recapturado.
Tampoco es un dato menor que Pedro Faustino Do Reis fue condenado por el homicidio de Valdemar Pereyra Antúnez, ocurrido el 27 de junio de 2004 en Colonia Aurora. Pero luego del hecho, el implicado se fugó y recién fue capturado en marzo de 2016 en Paraje Guabiroba, El Soberbio, de donde es oriundo.
El hombre logró mantenerse prófugo durante 12 años, de los cuales la mayor parte del tiempo transcurrió en Brasil.